Frankie Higginbotham está consciente de algo y es que detuvo todos sus proyectos de trabajo, a excepción de los Cangrejeros de Santurce en la Liga de Beisbol Profesional Roberto Clemente (LBPRC), para ayudar al torpedero de los Astros de Houston, Carlos Correa, en su ascenso al circo grande de las mayores.

Hace casi exactamente dos años, Correa, se lesionó su tobillo derecho luego de deslizarse en tercera base en un partido de liga menor. En ese momento, Higgibotham contó que estuvo al lado del pelotero para que mejorara.

‘Cuando Carlos Correa se lesiona en el 2014, estuve con él todo el tiempo, para la rehabilitación. Hablé con cinco o seis organizaciones para buscar el mejor doctor para operarlo. Todo ese trabajo lo hice yo’, indicó el gerencial de béisbol quien hoy día tiene una demanda en contra de su ex representado.

‘Paralicé todos los proyectos en mi vida, excepto el béisbol invernal, por atender a Carlos. Yo estoy finales (con él) de 2012, 2013, 2014 hasta junio de 2015, casi cuatro años sin cobrar un peso, poniendo dinero. Entonces, yo soy un buscón?’, cuestionó.

Higginbotham comenzó a trabajar con Correa luego de haber sido seleccionado en el primer turno del sorteo de novatos de 2012 por los Astros. Bajo su compañía, CFK Sports, Correa consiguió contratos con Topps y Adidas por una cantidad que nunca fue revelada, pero según se indicó era alta. También había conseguido otros contratos.

El campo corto santaisabelino terminó con la relación profesional con Higginbotham para enero de este año. Según dice Higginbotham, nunca se le dio una razón justa para finalizar el acuerdo ni tampoco los 30 días para refutar la decisión.

‘Carlos para mi es mi hijo. Tiene un cuarto en mi casa’, puntualizó Higginbotham, del mismo modo que aclaró que en ocasiones la relación fue más allá de lo estipulado en el contrato.

Su abogado, Víctor Rivera Ríos, explicó que ‘ese contrato era uno de mercadeo, uno de representación de imagen y propiedad intelectual. Él (Higginbotham) empezó a manejar más asuntos personales. Eso fue un pedido de parte de la familia. Manejaba no solo asuntos personales de Carlos sino de los padres’.