A un mes de que se cumpla un año del asesinato del niño Lorenzo González Cacho, la secretaria de la Familia, Yanitsia Irizarry, se reafirmó en que su agencia obró bien y protegió la seguridad de las hermanas de la víctima fatal al removerlas y entregar su custodia provisional al padre Ahmed González.

'Nos sostenemos en que el Departamento de la Familia en este caso, y en todos los casos ante nuestra consideración, ha hecho lo que tiene que hacer. No hemos cedido a presiones ni a manipulaciones, ni vamos a ceder', afirmó Irizarry.

La madre Ana Cacho, a quien el Departamento de Justiciaconsidera sospechosa del asesinato, no ha podido ver a sus hijas desde que varios días después de los hechos fueron removidas de su residencia en Dorado del Mar donde fue asesinado Lorenzo.

El Tribunal de Menores y Familia de Bayamón no ha emitido una sentencia final sobre la custodia permanente de las niñas. El caso ante ese foro judicial quedó sometido en diciembre.

'El tribunal tiene el caso sometido y nosotros con independencia de quiénes son sus padres y de dónde vengan hicimos unos planteamientos y esperamos que el tribunal en su momento dicte sentencia en el mejor bienestar de los menores', destacó Irizarry, quien fue abogada de asuntos de familia antes de ser nombrada al gabinete del gobernador Luis Fortuño.

Sobre la tardanza en la decisión sobre el futuro de las menores, dijo: 'Yo entiendo que la sentencia todavía está dentro del marco normal para un caso complejo como éste… el tribunal tiene que aquilatar la prueba y, en su momento, nos notificará sentencia'.

El asesinato del niño Lorenzo ha consternado al pueblo puertorriqueño, que se ha unido a múltiples manifestaciones frente a Justicia y otras dependencias gubernamentales exigiendo que se esclarezca el crimen.

El día de los hechos, Cacho llevó el menor al Centro de Diagnóstico y Tratamiento de Dorado alegando que el niño se había caído de la cama y la Policía presentando un informe preliminar en el que estableció que la muerte fue un incidente desgraciado.

Sin embargo, una autopsia del Instituto de Ciencias Forenses comprobó que el menor fue asesinado de dos punzadas luego de haber recibido un fuerte golpe en la cabeza.

Enentrevistas concedidas a un programa de chismes (Dando Candela), Cacho ha asegurado que no sabe quién mató a su vástago y que ella es inocente. No obstante, la mujer se ha negado a comparecer a entrevista ante la fiscalía argumentando que el día de los hechos dijo a las autoridades policiales todo lo que sabía.

Su madre, Ivette González, sí fue entrevistada por el Departamento de Justicia, pero en calidad de testigo y no de sospechosa.