AGP da detalles del 'almuerzazo'
En su primera entrevista a fondo tras el 'almuerzazo' que capturó la atención de todos durante la visita ayer del presidente estadounidense Barack Obama, el senador Alejandro García Padilla rechazó que el encuentro fuera comprado con donativos políticos, aseguró que tuvo oportunidad real de hablar de los problemas de la Isla, aunque no de la excarcelación del independentista Oscar López, y que siente que tiene el apoyo político de Obama para trabajar 'juntos'.
La idea de que el encuentro fuera un almuerzo vino del Presidente, y requirió que el también presidente del Partido Popular Democrático (PPD) se montara en la caravana presidencial desde el aeropuerto y no se bajara hasta llegar al Caribe Hilton.
La entrevista, esta mañana en Radio Isla, ya ha provocado por lo menos una reacción del Partido Independentista Puertorriqueño que, mediante su secretario Juan Dalmau, dijo que 'hay que tener vocación de arrastrao para sentirse emocionado porque le escogió un sandwichito al Presidente'.
Según García Padilla, 'el Presidente pidió que fuera un almuerzo y allí pudimos conversar sobre los asuntos que le interesan a los puertorriqueños... esa era la reunión para conversar sobre los problemas de los puertorriqueños'.
Sobre status, le planteó que en el PPD 'estamos dispuestos a mover esto hacia adelante, no en círculos' y sobre 'algunas intenciones de impedir que todo los puertorriqueños tengan oportunidad de expresarse'. Sobre crimen, le argumentó que uno de los orígenes de la actividad criminal es el desempleo, por lo que logrando empleos se reduciría el crimen.
'Llevamos ya varias semanas trabajando con esto, como sabes, estuvimos juntos hace poco en Washington', dijo sobre la gestación del encuentro que sólo atribuyo por nombre al senador Eduardo Bhatia y al presidente del Partido Demócrata en la Isla, Roberto Prats.
A preguntas de si el interés de Obama era genuino o si era sólo utilería para darle un cantazo al gobernador y republicano Luis Fortuño, García Padilla indicó que 'la política pequeña de 'tú me diste, ahora yo te doy' no estaba presente en la mesa... no era simplemente una conversación sobre datos y estadísticas, era un asunto de cómo resolver, cómo atender los problemas'.
'No era un 'yes and no, decir sí, no, ajá, qué chévere' y sonreir... yo lo pude corroborar ayer, que la sensibilidad que falta acá, el Presidente la tiene para los puetorriqueños. Él está muy, muy al tanto de lo que está pasando y tiene interés en resolverlo, y tiene interés en que lo hagamos juntos', añadió.
Al señalamiento de figuras del Partido Nuevo Progresista (PNP) de que el encuentro costó $600,000 en donativos políticos, reaccionó que 'eso es absolutamente falso, yo no participé ni el Partido Popoular participó, de ningún evento de recaudación de fondos'.
'La conjetura es una falta de respeto al Presidente de los Estados Unidos, y al pueblo de Puerto Rico. Lo que no acaba de entender el PNP es que el enemigo no es la gente del otro partido. Lo que no acaban de entender ellos es que mi enemigo a derrotar no son ellos, y que el enemigo que ellos deberían tratar de derrotar no soy yo. Los enemigos a derrotar en esa reunión eran el crimen, el desempleo, problemas en educación y en salud. Lo que no acaba de entender el PNP es que esto no es ya la pelea chiquita de PNP contra populares y contra independentistas. Aquí hay unos males sociales que tenemos que conbatir juntos como país, no como una isla cicatrizada donde en un lado aparecen los populares y en otro aparecen los penepés y yo exhorto al liderato del PNP y también al liderato de mi partido a tener esa madurez, esa madurez política', argumentó.
-Hoy usted se siente más cerca de la gobernación que ayer en la mañana?
-Porque falta un día menos, pero en cuanto a la necesidad de trabajar duro, ese trabajo nunca cesa.
Sobre qué le mostraba a Obama en su teléfono, momento recogido en la foto que el senador publicó en su cuenta de Twitter, dijo que eran fotos de sus hijos.
'Se comió el sandwich más rápido que yo, le gustó mucho, pidió incluso la receta para llevársela con él... le explicamos incluso a qué se refería con medianoche... pero sin duda alguna, el hecho de que el propio Presidente me pidiera que le ayudara a escoger el almuerzo era algo que se había pedido desde antes de la reunión, ponía un poco de presión', comentó.