La combinación de un sistema de educación roto, un sistema de retiro quebrado, y un nuevo empujón hacia el abismo económico con la amenaza de recortes federales, combinados todos en el escenario público durante la última semana, todavía no producen de parte del candidato a gobernador Alejandro García Padilla respuestas de cómo va a abordar esos problemas si se convierte en Primer Ejecutivo.

En esta ocasión, con motivo del inicio de clases, NotiCel quiso indagar sobre las propuestas del senador en el área de educación.

García Padilla admitió que, al igual que los hijos de la mayoría de los funcionarios públicos del país, los tres suyos estudian en colegios privados.

'Desde que yo me casé, mi esposa y yo decidimos que íbamos a complementar la crianza cristiana en la casa y con enseñanza formal. Por eso ellos están en una escuela católica', dijo sobre la educación de sus dos hijos mayores, que tienen 7 y 9 años. El más pequeño está una escuela preescolar privada.

Minutos más tarde, en una charla que ofreció como parte del Congreso de Líderes que se celebra en un hotel en Condado, García Padilla criticó las expresiones del secretario de Educación, Jesús Rivera, por decir que no tenía a sus hijos en las escuelas públicas del país porque quiere 'la mejor educación para mis hijos'.

Con su nuevo slogan 'no cambies de canal, permanezca en sintonía', el también Presidente del Partido Popular Democrático (PPD) aseguró que aún a 15 meses de las elecciones, es muy temprano para soltar prenda sobre detalles concretos de su plataforma como líder del país.

A preguntas sobre sus propuestas concretas en el área de educación, el funcionario dijo que 'el programa de gobierno y las ideas lo vamos a ir anunciando pronto'.

Sólo adelantó que sus esfuerzos irán dirigidos a erradicar la deserción escolar.

'Es inaceptable la deserción escolar. Vamos a presentar unos programas. Por ejemplo, mientras no hay chavos para los materiales para el salón de clases, hay chavos para anuncios de televisión', se limitó a repetir.

García Padilla también aprovechó para arremeter contra el Departamento de Educación denunciando que 'no estaba listo' para el comienzo de clases esta semana. A su juicio, 'hasta que no acepten que hay un problema, no podrán mejorar el sistema' que, además del grave problema de deserción escolar, fracasa en las pruebas de aprovechamiento académico suministradas a los estudiantes.