Construcción altera a vecinos de Floral Park
Vecinos de la urbanización Floral Park en Hato Rey denunciaron a NotiCel la movilización ilegal de carros por una grúa de la Policía que alegadamente asistió en horas de la madrugada del domingo a una compañía privada que construye un proyecto de vivienda en el área. Esto, sumado a un patrón de irregularidades en el que, aparentemente, las Empresas Terrakota han incurrido.
Según explicó el vicepresidente de la Asociación de Propietarios Residentes, Gerardo Targa, el incidente más reciente ocurrió entre a la 1:30 de la madrugada del domingo cuando se movieron dos vehículos privados, pertenecientes a los vecinos, para colocar dos barreras en la entrada de lo que se convertiría en un hospedaje especializado para personas de edad avanzada.
Gerardo Targa. (Josian Bruno/NotiCel)
'Es ilegal porque la Policía no mostró ninguna orden y esos carros tienen los marbetes al día. La Policía está siendo cómplice de los constructores, además permitieron la utilización de equipo pesado en la noche, sacaron una máquina para poner las barreras de construcción', detalló el residente que lleva casi medio siglo viviendo allí.
Aunque Targa indicó que la construcción del proyecto, que ubica en la Calle Lloréns Torres esquina Callé José Martí, apenas comenzó a finales de octubre, el anteproyecto del cual los vecinos no tenían conocimiento se aprobó desde el 2007 cuando aún el solar pertenecía a la Universidad Politécnica.
Del expediente que se conserva en la Oficina de Gerencia y Permisos se desprende que era inicialmente un proyecto con 90 apartamentos y 193 estacionamientos. Mientras que Empresas Terrakota se valió de ese permiso para expandir el proyecto del solar que compraron a la institución académica, y ahora presentó una propuesta de 160 apartamentos y solo 68 estacionamientos para The Golden Residence financiada por la Autoridad para el Financiamiento de la Vivienda de Puerto Rico a través de fondos federales.
En el memorial explicativo con fecha de 3 de mayo de 2010 se estableció que 'la variación solicitada no afecta adversamente el ambiente de la calle'. Esto, pese a que no se habría consultado, según se consta en el expediente, con los vecinos.
Sin embargo, Targa aseguró que sí la afectaría por tres razones principales: se agravaría el problema de estacionamiento, la infraestructura de la urbanización no está preparada y se pondría en riesgo a la población de envejecientes por el riesgo a inundaciones.
Sobre el problema de los estacionamientos, Targa recordó que 'los estudiantes de la Universidad se estacionan por la urbanización'. Según apuntó, es equívoco pensar que 'porque es un residencial para personas mayores no van a guiar y no tendrán carro'.
En cuanto a la infraestructura, insistió en que es una arcaica y obsoleta que no 'aguanta un proyecto más'. De hecho, criticó a la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados por no realizar un estudio de campo 'que indique si realmente tiene la capacidad para conectarse a las tuberías existentes, solo te las identifica y ya'.
Por otra parte, aseguró con evidencia en mano que, contrario a lo que revelan los mapas, la zona sí es inundable.
La Asociación, insistió Targa, lo que exige es que se celebren las vistas administrativas del proyecto que recibió el permiso sin que los residentes supieran sobre el desarrollo.
Pese a los intentos de querella de la comunidad, Targa argumentó que la 'Policía nos ignora, pero sí responde a los constructores', relató, tras recordar que la semana pasada lo citaron en Fiscalía, sin éxito, por alegadamente impedir la construcción.
Por lo pronto, los vecinos han colocado pancartas en sus residencias en repudio al proyecto.
(Josian Bruno/NotiCel)