El misterio y falta de transparencia con el proceso de compra y evaluación de los libros nuevos para las Escuelas del Siglo XXI del gobernador Luis Fortuño continúa, y el Departamento de Educación (DE) sigue escondiéndole información al pueblo de Puerto Rico, interesado en saber cómo se utilizan fondos estatales para la adquisición de textos escolares.

En esta ocasión, y tras la nota publicada ayer sobre su endoso al ‘fast track’ evaluativo, la directora del área de Español del DE, Nannette Portalatín Rivera, conversó con NotiCel luego de ser contactada telefónicamente y se negó a proveer información sobre el proceso de compra de libros, así como las casas editoras que han estado exhibiendo su material esta semana en las oficinas centrales de la agencia en Hato Rey.

En la reunión que este medio digital sostuvo el martes con ésta y otras funcionarias de alta jerarquía del DE, incluyendo la Subsecretaria para Asuntos Académicos, Grisel Muñoz Marrero, Portalatín Rivera dijo que los comités de maestras y maestros evaluaban esta semana textos nuevos de español para los grados 7mo, 8vo y 9no.

Dijo, además, que sólo cuatro casas editoras – de las siete con exhibidores en la Sala de Secretarios del DE – trajeron material para el área de español.

En la llamada de ayer, se le cuestionó a Portalatín sobre cuáles eran los nombres de esas cuatro casas editoras, pero ella se negó.

‘Voy a la oficina de mi jefa, antes de yo responder a cualquier pregunta, verdad, porque yo quiero que (ella) esté al tanto de que ustedes me están llamando y todo esto, te parece?’, dijo a NotiCel en torno a la necesidad de consultar a su jefa, la Dra. Grisel Muñoz Marrero.

Luego de transcurridos cerca de cinco minutos, Portalatín regresó al teléfono y dijo que no fue autorizada a proveer esa información.

‘No estoy autorizada a responder ningún tipo de preguntas’, expresó la directora del área de Español.

Luego de comunicar su decisión de no cooperar ni brindar la información pedida, se le vuelve a cuestionar por qué de las siete casas editoras con exhibidores, sólo tres – y no cuatro – presentaban textos para el área de Español.

Solamente, las casas editoras SM, Editorial Panamericana y Grupo Editorial Norma tenían material didáctico de esta materia.

Cuál era la cuarta?

Se le preguntó también a Portalatín sobre por qué en las librerías se vendían textos nuevos en español de SM y Santillana.

Portalatín contestó con tono de nerviosismo e incomodidad.

‘Incluso, Rafael, yo no sé cómo tú tienes acceso a mi número de celular privado. Esto lo pago yo misma porque ayer (martes) no me lo preguntaste, no creo que mi jefa ni Zaima (Negrón, oficial del prensa del DE), ni mi otra compañera Zamara (Jiménez, directora de área de Ciencias) que estuvieran allí, te hubiesen dado mi número. A mí me extrañó muchísimo esta llamada’, acotó la pedagoga.

‘No puedo hablar, tengo que terminar la llamada, muchas gracias’, concluyó y colgó.

Una fuente que tuvo acceso a la Sala de Secretarios en la tarde de ayer, pudo constatar que a diferencia del martes cuando habían exhibidores de siete casas editoras, en esta ocasión habían ocho, incluyendo a Santillana que no figuraba entre las vistas y documentadas con fotos y apuntes de NotiCel en su comparecencia de aproximadamente 20 minutos poco antes del mediodía del martes.

Será Santillana la cuarta casa editora que Portalatín no quiso aclarar?

Por qué Santillana no estaba el martes, a pesar de que el DE dijo en una reunión compulsoria con licitadores el 30 de julio que por regla, las casas editoras tenían hasta el lunes a las 4:00pm para montar exhibidores?

Si las directrices son enfáticas en garantizar la pureza del proceso, cuál es el temor de Portalatín y Muñoz de decir los nombres de las cuatro casas editoras que proveyeron libros de español?

Para leer las historias de la serie investigativa sobre este tema pulse los siguientes enlaces:

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Atropellado proceso de selección de textos de Escuelas de S. 21

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