El Senado confirmó el jueves a la juez Liana Fiol Matta como presidenta del Tribunal Supremo de Puerto Rico, convirtiendose en la segunda mujer en ocupar ese cargo.

La votación fue unánime.

Fiol Matta duraría poco en la posición ya que cumple la edad obligatoria de retiro de 70 años en el 2016. La jueza en un aparte admitió que desearía que se cambiase la disposición constitucional pero que le dejará esa determinación a los jueces que vengan después.

Fiol Matta fue designada en el puesto por el gobernador Alejandro García Padilla recientemente tras el retiro del entonces juez presidente Federico Hernández Denton. Fiol Matta es la segunda mujer en dirigir el Supremo después de la exjueza Miriam Naveira Merly.

‘De la evaluación antes esbozada, se desprende que la jueza asociada Fiol Matta es una persona capacitada, íntegra, organizada y con el compromiso necesario para ocupar el cargo de jueza presidenta del Tribunal Supremo. Tras examinar las calificaciones y los documentos recopilados en su expediente, esta comisión concluye que la nominada cumple a cabalidad con los requisitos necesarios para el cargo que ostenta ocupar’, el informe de la Comisión de lo Jurídico, Seguridad y Veteranos, suscrito por el presidente de ese organismo, el senador Miguel Pereira, dice.

Durante su vista de confirmación, Fiol Matta aseguró que no está ajena a la crisis fiscal por la que atraviesa el gobierno del Estado Libre Asociado de Puerto Rico pero que no claudicará en su deber de defender la independencia judicial y la autonomía presupuestaria. La Rama Judicial sufrirá recortes y una congelación en su formula presupuestaria.

Según la jueza Fiol Matta, desde la presidencia del Tribunal Supremo se debe procurar que la ciudadanía confíe en la verticalidad de los jueces y el desempeño transparente de sus funcionarios.

Entre las prioridades de la jueza Fiol Matta están los proyectos educativos de la Rama Judicial y de las salas de menores. ‘Quiero procurar que la educación sobre nuestros derechos y deberes y sobre nuestros tribunales llegue a todos nuestros niños, ampliando su alcance para que los niños entren a nuestras salas, que perciban la función judicial’, sostuvo.

De paso, dijo que ya el tiempo de repartir culpas sobre los problemas en el sistema judicial del país se acabó.

‘No estamos para echar culpas y decir si (fue culpa de) la Fiscalía o la Policía. Lo que estamos es para trabajar juntos hacia un mismo objetivo que es lograr que la justicia impere’, dijo.