Rosselló no se reúne con AGP por culpa del estatus
El precandidado por el Partido Nuevo Progresista (PNP) para la gobernación, Ricardo Rosselló, se niega a asistir a la convocatoria del actual gobernador Alejandro García Padilla, debido a que este descarta de la conversación sobre el futuro económico de Puerto Rico el asunto de su estatus político.
'La convocatoria de Alejandro García Padilla no es una invitación al diálogo. El lunes cuando estableció la convocatoria, dijo que los que pensaran que el estatus era parte de este issue estaban locos. El estatus tiene que ser parte de la solución, qué tipo de invitación es esa, qué tipo de respeto, cómo vamos a llegar a consenso', objetó Rosselló.
Su ausencia se ha hecho notar en la mesa del Gobernador, que ya se ha reunido individualmente con Pedro Pierluisi, contrincante de Rosselló en las primarias del PNP y presidente del partido, así como David Bernier, aspirante por el Partido Popular Democrático, Rafael Bernabe del Partido del Pueblo Trabajador (PPT) y los candidatos independientes Manuel Cidre y Alexandra Lúgaro, que tildó la renuencia de Rosselló como un acto inmaduro.
'Lúgaro no favorece la estadidad, yo entiendo que tienen que establecer que mi punto fundamental es que el estatus se tiene que atender, ellos no creen en eso, me sorprende que el presidente de nuestro partido (Pierluisi)avale esos puntos... La estadidad es primordial y nunca puede pasar a un segundo plano', dijo.
Rosselló se quejó además porque lo que al principio iba a ser un cónclave con todos los aspirantes sentados en mesa de diálogo, se transformó en reuniones individuales, del cual han aflorado puntos de consenso con los que dijo estar en total desacuerdo, tales como la opción de quiebra, la moratoria y el impago.
Desde su punto de vista, medidas como estas 'laceran la credibilidad' del pueblo de Puerto Rico y violentan la constitución en el renglón del pago de la deuda, sin ofrecer propustas para la reducción del gasto gubernamental ni en pro del desarrollo económico.
No obstante, se manifestó en contra de la imposición de la Junta de Control Fiscal por tres razones. 'Uno, no es colaborativa, es totalmente una imposición colonial. Dos, no provee instrumentos de desarrollo económico para Puerto Rico. Y tres, no tiene una ruta clara hacia la descolonización de Puerto Rico', explicó.
En su lugar, proponen una comisión conjunta, en que haya colaboración entre el gobierno local y el gobierno federal, para en primer lugar, pagar la deuda, y acompañar dichas acciones con estrategias de desarrollo económico y un componente hacia la estadidad.
Entre las metas de esta comisión, figurarían reestablecer la credibilidad de Puerto Rico, lacerada según Rosselló por 'la administración García Padilla-Bernier', para que pueda manejar el pago y la emisión de la deuda, borrar 'la negligencia con la que el Gobierno ha actuado emitiendo deuda y utlizándola para gasto gubernamental', y reducir este gasto a partir de una reforma de Gobierno.