Con la inauguración del primer Centro Medico Correccional de Puerto Rico, el Estado cumple con parte de los acuerdos del cierre de las estipulaciones del histórico caso Morales Feliciano.

Así afirmó el gobernador Alejandro García Padilla, quien expuso que los servicios que ofrecerá el Centro son ideas del propio tribunal federal en el 1997. En el 2000 se comenzó los estudios de viabilidad del Centro.

Fue durante la pasada administración que se comenzó la construcción del Centro, proceso que se completó en tres años y generó 300 empleos directos e indirectos. Las facilidades fueron desarrolladas y construidas por Correctional Health Servicies Corporation tras un contrato otorgado por el Departamento de Corrección y Rehabilitación.

Según García Padilla, el Centro requirió una inversión de más de $75 millones que provinieron de las multas pagadas por el Estado por incumplir con las estipulaciones del caso Morales Feliciano.

El Centro,que comenzará a operar el próximo 24 de marzo, empleará permanentemente a 178 profesionales de la salud y 214 oficiales de custodia. Este Centro contará con vigilancia como si fuera una institución de máxima seguridad.

La facilidad de tres pisos tendrá capacidad para 200 camas y ofrecerá servicios de emergencia a los 12,400 confinados, además de clínica dental, máquinas de Rayos X panorámicas, sonogramas, tomografías, nueve cuartos de aislamiento, terapia física, servicios de salud mental, entre otros.