La senadora Rossana López León alegó el jueves que ante el paso del huracán Mathew por el estado de la Florida, decenas de importadores locales, principalmente de la industria de alimentos, han visto interrumpidos el recibo de sus productos.

‘He recibido llamadas de varios importadores que me indican que sus importaciones están detenidas en el puerto de Jacksonville en Florida, por el paso del huracán Matthew. Desde ese puerto nos llega el 85 por ciento de nuestros alimentos y un atraso como este nos afecta de varias formas. Primero, puede haber escasez de alimentos tanto en supermercados como en restaurantes. Segundo, la calidad de los productos que se estancaron ante el cierre del puerto va a desmerecer en lo que salen para Puerto Rico. Esto dependiendo de cuánto tarde el puerto en recuperarse y operar nuevamente. Sabemos de cadenas de restaurantes, sabemos de cadenas de supermercados y de algunas empacadoras que están buscando alternativas para hacer llegar sus productos a la isla’, afirmó la senadora Rossana López León en un parte de prensa.

López León es autora de la Resolución del Senado 237, que investigó el impacto económico de las Leyes de Cabotaje en Puerto Rico. Entre otros, el principal descubrimiento de la misma fue el de seguridad alimentaria. Un evento reciente fue cuando el barco El Faro, navegó desde el puerto de Jacksonville directo hacia un huracán, decisión que costó 33 vidas y millones de libras de alimentos que venían a Puerto Rico en pérdidas.

‘El impacto económico de la dependencia de un solo puerto y dos o tres empresas navieras queda grabado por tercera vez. Recordemos el hundimiento de El Faro que según el manifiesto cargaba millones de libras de alimentos de todas las categorías. Por otra parte, pero la misma compañía Tote Maritime, quien era dueña de Sea Star, perdió miles de libras de café que también venía hacia Puerto Rico y fueron a parar a las playas de la Florida. Para colmo de males, ahora el huracán Mathew saca de operación el puerto al que estamos prácticamente obligados a comprarles todo’, señaló.

La Senadora cerró sus expresiones haciendo un llamado a la calma y solicitándole a los empresarios afectados a que se comuniquen a sus oficinas legislativas (787-724-2030) para buscarles soluciones a través del gobierno, así como organizaciones no gubernamentales que atienden las problemáticas Leyes de Cabotaje.