Los condominios Costa Marina, en Vistamar, albergan alrededor de cuatro botes abandonados, de los cuales ha crecido vegetación salvaje y que ha causado un problema de agua estancada, que afecta la salud y tranquilidad de los vecinos del área.

Así lo hicieron constar los propios vecinos a traves de la aplicación de NotiCel, Repórtalo, luego de que se quejaran infructuosamente con la administración del condominio aledaño.

La aplicación de NotiCel, Repórtalo ha sido eficaz en muchos casos de quejas de vecinos y está disponible gratis para la mayoría de los teléfonos celulares, mediante la cual vecinos y visitantes pueden reportar situaciones que deben ser atendidas por agencias gubernamentales. (Para bajar la aplicación haga clic aquí)

La administradora de Costa Marina, Benny Cabán, reaccionó sorprendida al ser abordada por NotiCel sobre las condiciones en que se encuentran algunos de los yates en el pequeño terreno aledaño a los apartamentos Vistamar Princess. Cabán mencionó que al terreno se le da mantenimiento, pero siempre queda agua estancada a causa de las lluvias que ha habido durante los pasados meses. El mantenimiento de los yates, sin embargo, es responsabilidad de cada dueño y el contrato no lo estipula como un requisito.

‘Tuvimos una situación por una persona que murió y su yate estuvo abandonado por tres años y todavía estamos detrás del banco para que se haga cargo porque no tenía familiares’, se limitó a contestar la administradora, al negar que haya algún tipo de dejadez en el mantenimiento de los yates o del terreno donde ubican alrededor de siete botes.

A los residentes de Vistamar Princess les molesta, sin embargo, los problemas de salud y tranquilidad que supone tener charcos de agua estancada, criadero de mosquitos y botes abandonados a pocos metros de sus residencias. ‘Eso ha sido una pelea de años. Siempre están los botes allí y no cortan bien la grama, y eso trae cucarachas y ratas’, mencionó Maribel Lozano, de 50 años.

‘Siempre estoy encerrada’, afirmó, por su parte, Bianca Rivera, de 28 años, en referencia al problema del estancamiento de agua que ha provocado un criadero de mosquitos. La residente tuvo dengue la semana pasada, y aunque admite que hay muchos mosquitos en el área por la cercanía a la Laguna la Torecilla, no descarta que también le hayan perjudicado las aguas estancadas que están a unos pocos metros de su terraza.

Rivera también se quejó del ruido que hacen los vecinos ocasionalmente con las reparaciones a los motores y del olor a diesel que invade todo el apartamento, a pesar de que la administración colgó un letrero que indica que esta prohibido hacer mecánica en los botes y lavar los motores en el lugar.

‘Esos botes han estado así desde que yo estoy aquí’, contestó la residente sobre la condición de abandono de algunos botes.

Este diario digital contactó a la división de estorbos públicos del municipio de Carolina, pero no obtuvimos respuesta.