Los contraceptivos orales son el metodo para prevenir embarazos más popular entre las mujeres a nivel mundial, lo que pudiera llevar a inferir que es la forma más satisfactoria de evitar la concepción. Sin embargo, tambien es sabido la cantidad de efectos secundarios que provoca.

Múltiples estudios han demostrado efectos emocionales y al metabolismo que pueden causar, y un estudio en particular apuntó que incluso puede influir en las mujeres a la hora de escoger una pareja.

Una nueva investigación apunta a que el uso de las pastillas está asociado a alteraciones neurológicas por su vinculación a ciertas regiones del cerebro, que incluso pueden alterar su funcionamiento, reseñó IFL Science.

Para este estudio, científicos de la Universidad de California estudiaron a 90 mujeres, de quienes 44 usaban contraceptivos orales, frente a las demás que contaban su ciclo natural. Se dedicaron a comparar el grosor y volumen de distintas regiones del cerebro en dos redes particulares. La primera se relaciona a funciones reaccionarias a estímulos, como el dolor, el ruido, que ayudan a la adaptación ante situaciones de adversidad o reto. La otra se activa más durante el descanso o la reflexión, y ayuda a evaluar estados internos.

Los investigadores encontraron que ambas regiones tendieron a ser más finas entre quienes consumían contraceptivos, lo que pudiera explicar la tendencia de que muchas féminas experimentan estados de ánimo negativos, como ansiedad o depresión, cuando comienzan las pastillas.

Aunque el estudio no pudo probar que los contraceptivos causaron estas alteraciones en la morfología del cerebro, o que estén relacionados a ellos, los hallazgos contradicen un estudio anterior que indicaba que estas regiones del cerebro aumentaban su grosor.

Estas pastillas portan hormonas sexuales que influyen en el sistema nervioso central, así que tienen sentido sus efectos, aunque aún es incierto si estas alteraciones son directamente provocadas por estas, y si permanecen o desaparecen una vez la persona deja de tomarlas.