Atleta etíope soñaba con el Príncipe de Asturias
OVIEDO (ESPAÑA) - El atleta etíope Haile Gebrselassie, que tiene dos oros olímpicos en 10,000 metros y que de 2007 a 2011 ha ostentado el récord mundial de maratón, ha dicho hoy que ha soñado toda su vida con ser galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de los Deportes, que para él es como un Nobel.
En rueda de prensa en Oviedo la víspera de que reciba de manos de Felipe de Borbón el premio Príncipe de Asturias de los Deportes, Gebrselassie ha afirmado que después de conseguir este sueño 'en serio' que ya no le preocupa qué más pueda conseguir.
Gebrselassie, de 38 años, tiene previsto competir en el maratón de los Juegos Olímpicos de Londres del año que viene, después de retirarse de los maratones de Nueva York de 2010 -tras el cual insinuó que podría abandonar el atletismo- y de Berlín del pasado septiembre, en el que el keniano Patrick Makau le arrebató el récord mundial.
'Llevo toda la vida soñando con este premio', ha confesado Gebrselassie, ya que es el mayor al que podía aspirar al no existir un Nobel de los deportes.
Haile Gebrselassie, conocido popularmente como 'el hombre de la eterna sonrisa', cree que el premio no lo recibe únicamente por sus méritos deportivos, sino que su interés y preocupaciones por las situaciones de pobreza en su país también son criterios que ha debido tener en cuenta el jurado, según ha respondido.
Y ha añadido que no sólo le interesan los problemas en Etiopía, sino 'en toda África también'.
De hecho, además de haber sido nombrado mediador del Gobierno de Etiopía para la resolución de conflictos y contra la pobreza, ha sido designado asimismo como embajador de buena voluntad de la ONU, tanto del Fondo para la Infancia (Unicef) como del Programa para el Desarrollo (PNUD).
Makau rebajó en veintiún segundos el récord mundial de maratón que tres años antes logró Gebrselassie también en Berlín -superando otro suyo del año anterior en la misma ciudad-, hasta situarlo en dos horas, tres minutos y 38 segundos.
Bajar de las dos horas en recorrer los 42.195 metros de un maratón le parece a Haile Gebrselassie que sí será posible.
Pero 'dentro de veinte o veinticinco años', ha augurado el atleta etíope.
En este sentido, ha recordado que hace quince años parecía difícil correr un maratón por debajo de las dos horas y siete minutos, cuando ahora 'ya no es nada' para los mejores maratonianos del mundo.
Gebrselassie ha resaltado que el entrenamiento es la base para los buenos resultados atléticos, que lo más importante es 'una gran dedicación', aunque ha agregado que hay otros factores necesarios para batir récords: la tecnología, los buenos entrenadores y una óptima selección de las pruebas en que competir.
'Creedme, bajar de dos horas será posible', ha insistido en su vaticinio, tras subrayar que en el atletismo se consigue ir 'siempre más y más rápido'.
A los dos oros olímpicos en 10.000 metros, Haile Gebrselassie suma ser cuádruple campeón del mundo (tres veces en 10.000 metros y una en 3.000 en pista cubierta) y haber competido en 3.000, 5.000 y 10.000 metros además del maratón, el medio maratón y los 20.000 y 30.000 metros, o haber conseguido el récord del mundo de la hora (cuando corrió 21.285 metros en sesenta minutos).
Creció en una granja de Etiopía y para ir a la escuela a diario corría diez kilómetros de ida y otros tantos de vuelta a una altitud de 1.400 metros.
La entrega de los Premios Príncipe de Asturias de 2011 se celebrará este viernes en el Teatro Campoamor de Oviedo.