El Real Madrid se clasificó para los cuartos de final de la Copa del Rey al vencer al Málaga por 0-1, que sigue sin ganar al conjunto madridista, en un partido que resolvió Benzema con la colaboración del portero argentino Willy Caballero.

El Real Madrid espera ya a su rival en cuartos de final. El FC Barcelona es favorito el jueves ante Osasuna para reeditar un nuevo Clásico del fútbol español.

Debido a la transcendencia del encuentro, los dos entrenadores, Manuel Pellegrini y José Mourinho, no reservaron a ningún jugador y alinearon a los habituales.

El Málaga quería dar la sorpresa y realizar algo similar a lo que ocurrió en el Bernabéu y el Real Madrid seguir optando a títulos, tras su liderato firme y distanciado en la Liga.

El único cambio con respecto a lo que jugaron por parte del equipo malagueño en el enfrentamiento de ida fue el del portugués Eliseu Pereira, por el centrocampista Apoño, castigado por Pellegrini por un incidente a la conclusión del encuentro de la pasada jornada contra el Atlético de Madrid.

Mourinho, no quería ningún tipo de contratiempo, ya que el susto se lo llevó hace una semana en el recinto madridista, y puso tres jugadores en el centro del campo, Lass, Khedira y Xabi Alonso, para contener el juego malaguista, además de Higuaín, que jugaba en su campo preferido, nueve goles le había hecho al Málaga.

El Real Madrid salió muy centrado, dominando con claridad ante un Málaga algo temeroso y que dio el balón al contrario. Esta situación se prolongó hasta el minuto diez cuando el equipo malaguista se estiró y con algunos centros al área madridista creó algún peligro.

El primer disparo del partido fue por parte del delantero uruguayo Sebastián Fernández, en el minuto 18, que frenó Casillas. El Madrid controlaba, pero el Málaga salía con rapidez por las bandas con la distribución de Cazorla. Eliseu, volvió a probar fortuna, pero su lanzamiento salió fuera por escasos centímetros.

El conjunto malagueño con la velocidad de sus bandas, sobre todo de Eliseu por la izquierda, que desbordaba junto con Monreal, una y otra vez a Arbeloa, que pecó de ingenuo en una entrada al lateral izquierdo, por lo que vio la tarjeta amarilla en el 30.

El Madrid estaba atascado, a pesar de su dominio, ya que el primer lanzamiento a portería fue en el 39 por parte de Khedira que paró Caballero y a la vez cayó lesionado en la misma jugada. Ozil fue el sustituto, y a partir de ese momento, el gol rondó a favor de los visitantes con un remate de cabeza de Sergio Ramos que rozó el palo derecho.

Al descanso con 0-0 y con mas jugadas de gol del Málaga que de su oponente, incluso con un último disparo de Eliseu, por el que tuvo que intervenir nuevamente Casillas. Mourinho, no lo veía claro y realizó un cambio Marcelo por Kaká, totalmente apagado.

El segundo tiempo se inició de una forma similar que la primera, con dominio madridista y con alternativas del Málaga, con otro lanzamiento de Eliseu, que a punto estuvo de marcar. El equipo malaguista evidenciaba bastantes síntomas de cansancio, que intentaba aprovechar el Real Madrid con llegadas, pero sin transformación.

Cristiano Ronaldo tuvo la oportunidad de desnivelar el marcador con un remate de cabeza, tras un centro por la izquierda, que picó y Caballero, realizó una gran intervención en el minuto 63. El Málaga estaba partido y gol podía llegar en cualquier momento. Higuaín marcó seguidamente, pero fue anulado por fue de juego.

El gol llegó cuando nadie se lo esperaba, tras una contra del Madrid y el lanzamiento de Benzema, flojo, se le coló a Caballero por debajo de las piernas en el minuto 71. Pellegrini, se la jugó con dos cambios, Buonanotte y Maresca, para dar algo más de profundidad.

El Málaga estaba a merced del Madrid. Sergio Ramos, de tacón tuvo el segundo pero se rehizo Caballero. Los instantes finales sirvieron para que el Málaga buscara el empate, pero Casillas lo desbarató. El Madrid espera rival, que en un principio será el Barcelona si el Osasuna no lo remedia.