Cuando John Velázquez se convierta mañana en el segundo jinete puetrorriqueño en entrar al Salón de la Fama del Museo del Hipismo en Sarasota Springs, Nueva York, lo hará cargando un baúl lleno de grandes experiencias, tanto dentro de la pista de carreras como fuera de ella. ?Desde chiquito estoy envuelto en esto de los caballos. Ha sido un camino largo para llegar aquí?, dijo Velázquez al ser contactado por NotiCel durante la mañana de hoy jueves.

‘Para mí es un gran honor ser seleccionado para el Salón de la Fama y ser reconocido. Hay muchas personas que tengo que agradecer que no te empiezo a decir por miedo de que se me quede alguien, ya que todas son importantes’, agregó Velázquez, uno de los máximos exponentes de este deporte no tan solo a nivel de Puerto Rico, si no a nivel mundial.

Para hablar de los logros de Velázquez, se necesitaría no tan solo otro reportaje, si no otro ‘site’ de noticias y cuidado si otro ‘browser’ cibernético. Intentémoslo.

Nacido en Carolina en 1971, Velázquez afirma que ‘me he criado en esto del hipismo’. En 1990 ganó su primera carrera en el entonces hipódromo El Nuevo Comandante, siendo acogido ese mismo año bajo el ala del legendario Angel ‘Junior’ Cordero, su mentor y único otro jinete boricua en entrar al Salón de la Fama de Sarasota Springs.

Su carrera alcanzó niveles astronómicos al mudarse a Estados Unidos bajo la tutela de Cordero. En 1998, ganó por vez primera la milla del Breeder’s Cup, encima del ejemplar Hoss. Ha ganado ocho Breeder’s Cup y también otros clásicos de monta multimillonaria, como el Kentucky Oaks, el Blue Grass Stakes, el Dubai World Cup, el EP Taylor Stakes, el Whitney Handicap, el Woodbine Mile y el Cigar Mile Handicap. En 2004 y 2005 fue el campeón de ganancias de los Estados Unidos y ganó los galardones de Jinete del Año. Mantiene el récord en el hipódromo de Saratoga Springs, con seis victorias en un solo programa, logrado el 3 de septiembre de 2001.

Este año, a sus cuarenta y una primaveras, ganó el Belmont Stakes arriba del ejemplar Union Rags. En 2011, logró lo que considera fue ‘el mayor triunfo de mi carrera’, cuando montó a Animal Kingdom en ruta a una victoria en el Kentucky Derby. Es decir, el tipo sabe ganar. Ahora, una de las cosas que más enorgullece a Velázquez es el trabajo logrado fuera de la pista y al frente del Jockey’s Guild, gremio estadounidense que reúne a la mayoría de los jinetes que participan en los hipódromos norteamericanos.

‘Sí, te puedo decir que el Kentuck y Derby es el evento más grande que he ganado, pero otro logro que a mí me llena de satisfacción es lo logrado al frente del ‘Guild’. Eso es otro trabajo fuera del trabajo y ha sido una experiencia grandísima, ya que es un una labor que hago en defensa de los derechos de todos los jinetes. Cuando llegamos aquí, el ‘Guild’ estaba en unos niveles bien bajos y hemos tenido que volver a ganarnos el respeto de los dueños de caballos y de los accionista de los hipódromos. De hecho, en estos momentos creo que es cuando mejor comunicación ha habido entre nosotros y los hipódromos. Hemos logrado que se nos respete, que todos en el mundo del hipismo nos den lo que nos merecemos, pues día a día estamos allá afuera arriesgando nuestras vidas’, manifestó Velázquez.

De hecho, Velázquez se sorprende aún cuando ve que su deporte a veces no es considerado entre los más sacrificados del mundo, pues el público en general, especialmente en Puerto Rico, quizás está acostumbrado a ver el boxeo, el baloncesto, el béisbol, y, gracias a Javier Culson, el atletismo como las principales disciplinas deportivas.

‘Es una vida que es complemente diferente de la vida normal. Es un deporte bien agresivo y hay que estar bien dedicado a todo lo que uno hace. El peso es algo que hay que mantener y tratar de hacer un peso es bien difícil, pregúntale a los boxeadores. Hay que tener una dieta para mantener el peso adecuado. Esto conlleva mucho sacrificio’, señaló Velázquez.

‘Y cuando te hablo de sacrificio, te digo que esto se trata de toda una vida. Uno tiene que dedicarse con mucho trabajo y también mantenerse al tanto y ser agradecido. Hay muchas personas que llegan a la fama temprano en la vida y se olvida de dónde uno viene y se olvida que es un sube y baja este negocio. Por eso yo estoy agradecido con el destino y con Dios por haber llegado al Salón de la Fama. No es fácil’, acotó Velázquez.

La clase 2012 del Salón de la Fama del hipismo sera exaltada mañana, viernes, a las 10:30 AM en el Pabellón de Fasig-Tipton, en Saratoga Springs, Nueva York. Junto a Velázquez, serán también declarados inmortales su colega jinete, Anthony Hamilton, los entrenadores Roger Attfield y Robert Wheeler, y los ejemplares Ghostzapper y Planet.