El tenista español Rafael Nadal dijo hoy tras clasificarse para la final del Abierto de Estados Unidos que el partido del próximo lunes contra el serbio Novak Djokovic va a ser ‘complicado’ y con el rival ‘más difícil’.

‘Voy a darlo todo el lunes e intentar ganar, pero va a ser un partido complicado y con el rival más difícil en este momento’, dijo Nadal ante la prensa en Nueva York despues de su victoria en las semifinales contra el frances Richard Gasquet.

La final en la pista central de Flushing Meadows será el partido número 37 en el que se enfrentan el español y el serbio, y Nadal lo tiene claro cuando le preguntan por su rival. ‘Prefiero jugar con cualquier, pero es lo que es’.

‘Hay que ser honestos, en una final como esta prefiero jugar con alguien con quien tenga más probabilidades de ganar’, dijo el tenista mallorquín, para añadir que han jugado antes muchas veces y siempre han sido ‘partidos muy emocionantes’.

Por eso saldrá el lunes a la pista a intentar hacer ‘un partido fantástico’ para tener opciones de ganar al número uno del mundo en una final en la que, según dijo, no cuenta el desgaste que hayan podido sufrir en las semifinales.

‘Es una final de Grand Slam. Sea cual sea el cansancio, no existe. Es un solo partido y lo tienes que dejar todo’, dijo Nadal cuando le preguntaron por el posible desgaste de Djokovic tras necesitar más de cuatro horas para ganar al suizo Stanilas Wawrinka.

En todo caso lanzó una advertencia a su rival. ‘Por mi no va a quedar. Voy a pelear todo lo que pueda para llegar bien preparado mentalmente, físicamente y tenísticamente. Necesito unir esas tres cosas para que la victoria sea una posibilidad’, dijo el manacorí.

Sobre el duelo contra Djokovic, que será el undécimo en finales de torneos de Grand Slam que disputan y el tercero en su historia común en Nueva York, Nadal confió que el serbio no haga un partido ‘ultrabrillante’.

Nadal ganó el Abierto de Estados Unidos en 2010 y perdió en 2011 contra Djokovic, dos jugadores que se han enfrentado como profesionales en 36 ocasiones, de las que el español ganó 21 y el serbio 15. El lunes tendrán una nueva oportunidad.