Los Gigantes dominan a las Estrellas Orientales 2-1.

SANTO DOMINGO – Marcell Ozuna ha guiado el trote del ataque de los Gigantes del Cibao en la final del campeonato de béisbol invernal dominicano, frente a las Estrellas Orientales, no solo mostrando su gran poder con el madero, sino respondiendo en el momento preciso para darle el triunfo a su equipo.

Los Gigantes encabezan la final con marca de 2-1, un resultado en el que Ozuna ha sido vital, respondiendo cuando ha sido inevitable que conecte de imparable, para poder producir para su equipo.

El jardinero de los Bravos de Atlanta en las Grandes Ligas, lidera la final en carreras remolcadas, con un total de cinco vueltas producidas.

Ozuna, quien también encabeza la lucha por la corona de campeones de la liga dominicana en jonrones, mandó la pelota fuera del parque en el segundo encuentro de esta serie, con dos corredores en las bases y nuevamente se fue por encima de la verja en el tercer partido, con un hombre en las bases.

Cada uno de estos batazos de vuelta completa, colocó en la delantera a los Gigantes, quienes terminaron ganando ambos encuentros.

Lo importante de los tablazos de Ozuna, quien ha llevado al plato el 25 % de las 20 carreras que han anotado los dirigidos por el colombiano Luis «Pipe» Urueta, es que cada uno de ellos, los ha conectado luego de dos outs, por lo que cada una de sus impulsadas han llegado en una situación que es imprescindible disparar de hit para poder producir.

El 50 % de sus cuatro imparables son cuadrangulares, logrando una frecuencia de un jonrón cada seis turnos al bate, registrando con ello un slugging de .833, el mejor entre todos los bateadores de la final.

Ozuna, quien fletó tres imparables en cuatro turnos al bate en el pasado encuentro, ha pisado la goma en cuatro oportunidades, muestra de que no solo ha llevado hombres al plato para los de San Francisco de Macorís (noroeste).

En las dos victorias que los Gigantes han obtenido en la final, Ozuna ha pegado cuatro imparables en siete visitas al plato, logrando un promedio de bateo de .571, con dos jonrones, cinco remolcadas y cuatro anotadas, siendo indudablemente el factor clave para el éxito de su equipo.

Los potros aspiran a conquistar la serie pautada al mejor de siete juegos y para ello, Ozuna y el poder de su bate, continuarán siendo un factor fundamental.