Los artesanos hacen su agosto, pero los comerciantes no.

Las fiestas de la Calle San Sebastián del 2011 no han sido muy productivas para los comerciantres dueños de establecimientos que venden bebidas de todo tipo, pero, contrario al año anterior en el que hubo dos días de lluvia, sí fue productivo para los artesanos que estuvieron destacados en el interior del Cuartel Ballajá.

Aunque las ventas de los artesanos ante la falta de lluvia estuvieron mejores que en el 2010, la falta de instalación de un sistema de cobro con tarjetas de débito los afectó.

Aimé Rubio, artesana de mácaras de yagua, cerró su kiosko a las 5:30 de la tarde debido a que vendió toda su mercancía. La única crítica de Rubio este año fue que ninguna institución bancaria facilitó a los artesanos un sistema de cobro para tarjetas de débito, lo que a su vez reduce sus capacidades de venta pues no todas las personas andan con efectivo para gastar.

"Yo por lo menos lo vendí todo, pero este año no pusieron ni tan siquiera una ATH afuera, ni en la plaza y eso nos afecta", dijo Rubio a NotiCel.

Artesano Jaime Cruz (Foto:Josian Bruno)

En términos similares, se expresó el artesano Jaime Cruz, quien aseguró que las ventas de este año mejoraron por la falta de lluvia. El pintor de camisetas, de 27 años, aseguró a NotiCel que los primeros dos días estuvieron "lentos", pero sábado y domingo "la cosa mejoró".

"Mucha gente me ha preguntado por la ATH y yo traje una máquina pero no estaba funcionando porque no había sistema", indicó.

Artesana Gladys Febus (Foto: Josian Bruno)

Mientras, el matrimonio integrado por Alejandro Sánchez y Gladys Febus, quienes trabajan con clavos de herradura de caballos, las ventas estuvieron buenas.

"Yo esperaba que fueran más lentas, pero han estado muy buenas", aseguró Febus, quien tiene su taller herrante en Bayamón.

Entretanto, varios comerciantes se quejaron porque asegurararon que la limitación del horario de expendio de bebidas alcohólicas afectó sus ganancias.

Roberto Rosario, dueño del negocio El adoquín del Patio, en el Callejón del Calle Tanca, aseguró que sus ventas mermaron en un 40% y ciriticó el horario de cierre a la 1:00 de la madrugada, pues las autoridades no pudieron sacar al público pasadas las 3:00 de la mañana.

"Después que la gente está ya en tragos y en su apogeo, para sacarlos es una chavienda", dijo.

Mientras, el dueño de Aquí se Puede, José Enrique Montes, dijo que "los que trabajan en la industria de los hoteles no pueden llegar a las Fiestas porque salen de sus trabajos a las 11:00 de la noche y más tarde y no van a llegar hasta acá".

Clientes de Rivera Hermanos disfrutan de la última noche en SanSe 2011 (Foto: Josian Bruno)

Mercedes Rivera, por su parte, aseguró que sus ventas estuvieron "bien", pero criticó que el horario de cierre se haya establecido sin una consulta pevia con los comerciantes.

De acuerdo con Rivera, el alcalde Jorge Santini lleva más de 3 años sin reunirse con los comerciantes, no sólo de la Calle San Sebastián, sino de todo el Viejo San Juan. "Lo más importante es el diálogo, que se reúna con nosotros y que podamos expresarle nuestro sentir", señaló.

Indicó que mientras a los comereciantes que pagan patentes municipales los obligan a cerrar a una hora específica, no ocurre lo mismo con negocios ilegales y subrayó que en La Perla no son obligados a cerrar, lo que representa una competencia desleal para los que sí cumplen con sus responsabilidades fiscales.