Latinos salvan mercado inmobiliario en Miami
Miami.- Las inversiones de brasileños, argentinos, venezolanos y mexicanos, entre otros, han resucitado al mercado inmobiliario del sur de la Florida, uno de los más castigados durante la crisis hipotecaria que azotó a la mayor parte del país a partir del 2008.
Jacobo Sar Shalom, por ejemplo, buscaba lujo y exclusividad para pasar sus vacaciones familiares en Miami. Y recientemente pudo concretar su sueño de años: el empresario textil venezolano compró un apartamento con ascensor privado, vista panorámica al océano Atlántico y acceso directo a la playa a poco más de la mitad de lo que costaba en 2007, antes que estallara la crisis inmobiliaria.
'Lo que compré ahorita fue una oportunidad de precios y espero que se revalúe con el tiempo', expresó el empresario de 39 años. 'Hubo un momento en que todo estaba demasiado caro y ahora estamos en la época en la que hay que invertir', aseguró en comunicación telefónica con The Associated Press desde Caracas.
Sar Shalom es uno de los numerosos latinoamericanos que han llegado a Miami para comprar propiedades en los últimos dos años, atraídos por la caída de los precios y un panorama económico y político de la región que hace que invertir en la Florida resulte ventajoso.
Se calculaba que Miami necesitaría unos 10 años para recuperarse y vender los más de 20,000 apartamentos que se habían edificado en la zona céntrica durante el auge de la construcción, entre el 2003 y el 2007.
Las ventas, sin embargo, se reactivaron en la segunda mitad del 2010 y ya se han vendido cerca del 80% de los apartamentos de la zona céntrica y sus alrededores, de acuerdo con un estudio de la Dirección de Urbanización del Centro de Miami, una agencia independiente dedicada a alentar el desarrollo del área.
Del total de las compras en el centro y en las playas, los expertos estiman que entre el 50% y el 70% son efectuadas por latinoamericanos, que en su mayoría pagan de contado y no dependen del escaso financiamiento hipotecario que ofrecen los bancos estadounidenses.