La Cámara de Mercadeo, Industria y Distribución de Alimentos (MIDA) aclaró hoy que no ha habido un aumento en la canasta básica del 12% como habría anunciado el Departamento de Asuntos del Consumidor, sino que la inflación de los alimentos se ha mantenido a la par con la inflación general entre un 3 a 4%.

El economista Gustavo Vélez validó, según un comunicado de la Cámara de Mercadeo las expresiones de MIDA indicando que la fuente oficial de data inflacionaria es el Índice de Precios al Consumidor publicado por el Departamento del Trabajo, el cual ha sido revisado constantemente y es el único que actualmente cuenta con la rigurosidad científica y estadística necesaria para ese tipo de instrumento de medición.

'Nos sorprende que el DACO haga un anuncio tan distante de los datos oficiales, toda vez que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) para el sector de los alimentos en noviembre, apenas creció en 4%', dijo el economista de MIDA, Gustavo Vélez.

Vélez explicó que durante los pasados meses el propio 'Informe sobre el Costo de Vida', que prepara el Departamento del Trabajo y Recursos Humanos, publicó que el aumento inflacionario en el renglón de los alimentos es consistente con el incremento en los precios del resto de productos y servicios en el resto de la economía.

'Entendemos que el instrumento más preciso para medir el costo de vida es el IPC. La información empírica indica que la industria de alimentos particularmente los supermercados, ha sido muy efectiva combatiendo las presiones inflacionarias generadas por el aumento en el costo de energía y más recientemente el costo de la inspección de los furgones ('furgonazo')', dijo Vélez, añadiendo seguidamente que 'los altos niveles de competencia han obligado a los diferentes jugadores en la industria a reducir sus márgenes para mantenerse competitivos ante un consumidor con menor poder adquisitivo. Desde esta perspectiva entendemos que el gobierno y la industria deben enfocarse en trabajar de forma coordinada para habilitar una política pública alimenticia, que beneficie a la economía y a los consumidores'.

El vicepresidente ejecutivo de MIDA, licenciado Manuel Reyes Alfonso, explicó que 'a pesar de los aumentos en los costos de algunos productos, la característica fundamental de los supermercados es que cuentan con miles de productos sustitutos que permiten a los consumidores hacer ajustes para paliar cualquier aumento en el precio de un artículo'.

'Por ejemplo', continuó Reyes Alfonso, 'en la nota de prensa el DACO menciona el Corned Beef como el principal responsable del aumento, lo cual se ha debido a circunstancias particulares en los países de producción, pero los consumidores tienen muchas alternativas de proteína que no han subido dramáticamente'.

El presidente de MIDA, doctor Ferdysac Márquez, hizo hincapié en que es imprescindible para el país el desarrollo de de una política alimentaria para trabajar con los retos que representa la inflación de los alimentos, proyecto que MIDA se encuentra trabajando para presentarles propuestas específicas a los candidatos a la gobernación.

Recordó además que MIDA ha sido consistente advirtiendo al país que algunas decisiones de política pública contribuyen inadvertidamente en la inflación de los alimentos.

'Si se siguen añadiendo costos a la cadena, como es el caso del impuesto a los furgones, incrementos en impuestos municipales y los aumentos en la energía, es evidente que los mismos se van a reflejar en el precio. Por ejemplo, MIDA no tiene objeción a que se inspeccionen furgones pero si se cobra por ello es inconcebible argumentar que ese costo no pasará a los productos como dijo el Director de Puertos en conferencia el pasado 10 de diciembre. Es distinto decir que el efecto de este impuesto vale la pena, lo cual debería demostrarse en función de su objetivo; si es seguridad por alguna merma en el crimen o por la incautación de armas y drogas, y si se trata de cobrar arbitrios pues por el cobro efectivo de contrabando. Pero no es posible argumentar que no tendrá impacto en los precios que es lo que hemos estado diciendo', explicó.

'Aprovecho para recordar que desde noviembre se está cobrando este impuesto no sólo a los furgones sino al 100% de la carga, a pesar de que sólo se está inspeccionando una fracción de los contenedores y que el proyecto no contemple inspeccionar la carga suelta, a granel, carros, etc. Reclamamos una política integrada para evitar que nuestra población de siga empobreciendo como consecuencia de la implementación descoordinada de políticas posiblemente bien intencionadas', concluyó Márquez.