Latinoamérica y Caribe reclaman cooperación y precios estables
Quito - Latinoamérica y el Caribe levantaron su voz en busca de más cooperación regional y formularon un llamamiento a los países desarrollados para que pongan fin a la volatilidad de los precios de las materias primas, al término del XVIII Foro de ministros de Medio Ambiente de la región.
Lo anterior consta en la declaración final de la cita, a la que Efe tuvo acceso hoy, y en la que se apunta que en el marco de la adopción de una agenda ambiental regional 'se fortalecerán los lazos de cooperación Sur-Sur'.
En el documento instan a los países desarrollados 'a que pongan fin a la volatilidad en el precio de los commodities (materia prima) a nivel mundial y la definición de sus precios, provocado por la especulación financiera y al margen de consideraciones ambientales y sociales'.
El Foro comenzó el pasado martes, en Quito, con reuniones de expertos a las que se unieron desde el jueves varios ministros de ambiente de la región con el objetivo de encontrar una posición común con miras a la Conferencia de la ONU de Desarrollo Sostenible Río+20 que tendrá lugar en junio próximo en Brasil.
En la declaración acordaron que se aliente a Río+20 para que considere, en el contexto de la seguridad alimentaria y desarrollo agrícola, 'la excesiva volatilidad de los precios de los alimentos y la especulación en los mercados de productos básicos, como un tema emergente'.
Los ministros insistieron en que para lograr un desarrollo sostenible se debe erradicar la pobreza, promover la inclusión y equidad social.
Por ello consideran a Río+20 una oportunidad para orientar esfuerzos en la construcción de un nuevo orden económico internacional 'más justo, equitativo e inclusivo que supere el desgaste, descrédito y limitaciones del modelo de desarrollo vigente'.
Los ministros aseguran que se debe fortalecer o crear mecanismos y estructuras financieras regionales propias, que garanticen la provisión de recursos para apoyar a los países de la región en la implementación de las actividades en pro del desarrollo sustentable.
También instar a los países desarrollados a incrementar sus compromisos de financiación a favor de América Latina y el Caribe para la mitigación y adaptación 'con fondos nuevos, adicionales, suficientes y no condicionados, en armonía con el principio de responsabilidades comunes pero diferenciadas'.
En la cita, la región acordó que en Río+20 se discuta una declaración universal de los derechos de la naturaleza como instrumento para alcanzar el buen vivir, algo que consta en la Constitución ecuatoriana.
La Carta Magna apunta, entre otros, que la naturaleza 'tiene derecho a la restauración' y señala que el Estado aplicará medidas de precaución y restricción para las actividades que puedan conducir a la extinción de especies, la destrucción de ecosistemas o la alteración permanente de los ciclos naturales.
Los ministros también consideraron que en el futuro marco institucional para desarrollo sostenible se revisen los roles y mandatos de los órganos de la ONU para que 'se relacionen eficientemente actuando en forma coherente, coordinada y cooperativa sin sobreponer sus agendas, funciones y problemas similares'.