El Tompy, la iconográfica cafetería ponceña que por más de treinta años ocupó la esquina de las calles Mayor e Isabel cierra sus puertas para siempre.

Con lágrimas en los ojos, la voz entre cortada y tras meses de luchas y peripecias económicas, Tomas Ortiz Robledo propietario de la cafetería confirmó la decisión sin que la emoción le permitiera dar más detalles al Periódico La Perla del Sur sobre las razones para el cierre.

‘No puedo hablar en este momento. Solo quiero darle las gracias al pueblo y los comerciantes de Ponce por el apoyo y el cariño que siempre nos dieron’ dijo.

El Tompy abrió sus puertas al comienzo de la década del 1980 pero no fue hasta el 1983 cuando el negocio se encaminó gracias a una oferta de desayuno que incluía 2 huevos. Jamón, tostadas, jugo y café, por solo noventa y cinco centavos.

Aunque desde hace un tiempo a esta parte, el negocio venía sufriendo el impacto de la maltrecha economía y de los cambios demográficos de la ciudad, la noticia fue recibida como un balde de agua fría por los comerciantes de Casco Histórico quienes mostraron su apoyo convocando a una reunión para despedir a la legendaria cafetería.

‘Es una tristeza enorme saber que esa esquina emblemática ya no albergará la gentileza y la bondad de Tomás.’ dijo Graciela Rodríguez Martinó, copropietaria de la Verdadera Casa de las Tias.

Aunque no comparten la misma clientela ni los mismos horarios, la comerciante entiende que el cierre les afectará, ‘ya sea psicológica o emocionalmente’ a su negocio.

‘Ver estructuras cerradas no es un buen aliciente ni para el alma ni para el bolsillo y son un símbolo de la precariedad económica que vive la ciudad’ sentención la también comunicadora y periodista

Rodríguez Martinó se mostró esperanzadas en que tanto Rumba y café, así como Raftaroots ubicados alrededor de Tomás, se mantengan abierto que ‘cultiven el mismo espíritu empresarial que nos legó Tomás’.

Por su parte, José Francisco ‘Pancho’ Alvarado Ortiz dueño del desaparecido Dulce Fruta convocó al pueblo para que se despida El Tompy como se despiden a los íconos.

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