En vías de convertirse en la institución líder en el cuidado de salud mental y física en Puerto Rico, el Hospital San Juan Capestrano invertirá $19 millones para construir un edificio con 40 camas nuevas, expandir instalaciones recreativas, y elevar la tecnología y calidad del servicio.

Hasta el momento han utilizado cuatro millones de la inversión para la apertura de una nueva estación de dos niveles con 20 camas y alta seguridad para los pacientes.

‘Estamos enfocados en la seguridad porque cuando las personas traen a un ser querido quieren que sea bien tratado, y no atente contra su vida ni la vida de terceros. Pensamos en un ambiente bonito con muchas áreas de comunidad’, destacó la directora de la institución,licenciada Marta Rivera Plaza.

La portavoz explicó que el hospital lleva trabajando hace 27 años con altos rasgos de calidad, pero desde que fue comprado el año pasado por la empresa Acadia,antiguos propietarios del Hospital Panamericano, ha experimentado una metamorfosis en sus clínicas incluyendo las de Ponce, Coamo y Condado, además de la de Trujillo Alto.

Las siguientes fases de la remodelación y construcción incluirán un gimnasio y la ampliación del área del estacionamiento. Todo deberá completarse para agosto del 2015.

Con las 24 camas nuevas para pacientes con adicción y otras 22 camas para la población de adolescentes, San JuanCapestrano cuenta con 132 camas al momento. Con la expansión de $15 millones, la institución tendrá 172 camas en 2015.

‘Nuestro hospital se coloca como líder de salud mental en Puerto Rico para enfrentar los retos y oportunidades de la industria hospitalaria donde se exige calidad y eficiencia para beneficio del paciente’, abundó Rivera Plaza.

El hospital reforzó el servicio ambulatorio con un nuevo programa para rehabilitar personas con adicciones conocido como ‘Intensive Outpatient Program’ (IOP), que ofrece apoyo post hospitalización durante cuatro meses, incluyendo atención intensa en los primeros dos meses con citas tres veces a la semana. El IOP sigue los parámetros federales establecidos por laAdministración federal de Servicios de Salud Mental y Abuso de Sustancias (SAMHSA, por sus siglas en inglés).

‘Es un programa que produce resultados, con logros comprobados. Luego de dos meses intensos, las visitas se reducen a dos veces por semana y en el cuarto mes los graduamos. Después le damos seguimiento, los llamamos y le ayudamos a que no se produzca una recaída’, explicó la Directora.

También ofrecerán servicios a veteranos, enfocados en las necesidades específicas de este grupo.