La casa evaluadora de credito Fitch sometió el credito de Puerto Rico a una degradación adicional (de BB- a B) y lo colocó en vigilancia negativa debido a la incapacidad del Gobierno para lograr pasar la Reforma Contributiva y debido a las señales que ha dado la Legislatura de que buscaría una reestructuración de la deuda o que afectaría adversamente los intereses de los bonistas.

‘Fitch degradará el crédito inmediata y significativamente si avanza en el proceso legislativo alguna propuesta que reduzca las protecciones que tiene la deuda general y la deuda apoyada con impuestos, o si hay alguna otra evidencia tangible de que el Gobierno está considerando la reestructuración de la deuda pública general’, dice el informe emitido esta tarde.

‘Los próximos dos meses serán críticos para Puerto Rico. Además de la suerte que corra (la emisión de bonos basada en la ‘crudita’) para aumentar la liquidez, serán significativos el desempeño de ingresos y gastos de 2015, el progreso de la propuesta contributiva del Gobernador y el presupuesto de 2016′, añadieron.

Fitch entiende que la posibilidad de una reestructuración de la deuda o alguna forma de pago está sobre la mesa no sólo ahora sino que permanecerá vigente hasta por lo menos las próximas elecciones.

Por otro lado, y en cuanto al estado inmediato del fisco, la casa evaluadora plantea que llegar a un balance en ingresos y gastos será ‘retante’ debido a que el Departamento de Hacienda se sigue quedando corto en sus recaudos y a que los gastos aumentarán por el lado del pago de la deuda vieja y por el financiamiento de las pensiones en el presupuesto del año entrante.

Para Fitch, la Legislatura ha dado ‘señales mixtas’ cuando, por un lado, apoya las enmiendas a al emisión de la ‘crudita’ pero, por otro, se introduce legislación que permite alterar los acuerdos con los bonistas como la más reciente del representante Javier Aponte Dalmau para imponer una contribución especial a las ganancias de aquellos bonos que inicialmente se vendieron como exentos de contribuciones. Subrayaron también el riesgo presente por la falta de acciones mayores para evitar que los sistemas de pensiones se agoten para el 2020.

La agencia enfatizó también en los riesgos que enfrenta la propuesta de reforma tributaria del Ejecutivo y ‘la pobre hoja de desempeño que tiene el Gobierno en lograr cambios y estimar sus resultados’.

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