Concretar acuerdos con al menos 50 municipios para que recauden el Impuesto de Ventas y Uso (IVU) ha sido más cuesta arriba de lo que esperaba el secretario del Departamento de Hacienda, Juan Zaragoza Gómez. La oposición de algunos municipios para ser recaudadores de la agencia ha frenado la meta que el funcionario se puso para octubre.

Uno de los municipios renuentes a llegar a un acuerdo es Comerío. El alcalde José A. Santiago, planteó que su ayuntamiento se rehusa a convertirse en recaudador porque Hacienda pretende que corran con los gastos de recolectar el IVU. ‘Hacienda paga a entidades privadas para hacer esto. Le paga a Banco Popular y no es razonable que no podamos cobrar por esto’, dijo hoy, jueves.

De hecho, Zaragoza modificó sus comentarios en declaraciones escritas para expresar que ahora espera añadir cinco municipios a su lista de 20 que ya han aceptado recolectar el IVU para totalizar 25 acuerdos en diciembre.

Según Zaragoza la alianza autoriza a las partes a intercambiar información sobre el IVU y comparar hallazgos. Entre los deberes y obligaciones de Hacienda, está proveerle a los municipios la información sobre el IVU que reportan los comerciantes, así como informes y auditorías relacionadas. También se compromete a ponerlos al tanto sobre cualquier evasión, ambigüedad, contradicción o irregularidad que identifiquen al analizar la información relacionada a la captación del IVU.

Los municipios, por su parte, proveerán información relacionada con el IVU y con las patentes municipales, copias de informes y auditorías relacionadas con el IVU e informes sobre los comercios que operan en su jurisdicción, entre otra información.

El acuerdo también estipula que Hacienda brindará y coordinará adiestramientos para el personal asignado a realizar las funciones establecidas. Esos adiestramientos comenzaron el miércoles, y participaron directores de finanzas, auditores municipales y agentes de Rentas Internas.