Ambos candidatos atienden temas similares en sus planes de gobierno, pero distan en la forma en que los atenderían. Una mirada a los documentos refleja que uno es más detallado que otro.

Si bien Juan Dalmau Ramírez y Pedro Pierluisi Urrutia representan los polos más opuestos en la visión de estatus de Puerto Rico, sus respectivos planes de gobierno en ocasiones atienden problemas similares, aunque se distancien en cuanto al acercamiento teórico y la ejecución propuesta.

Ambos han planteado, por ejemplo, la necesidad de un gobierno más transparente y eficiente, de resolver la violencia de género, despolitizar agencias como Educación y Agricultura, e impulsar el desarrollo económico para sacar a la Isla de la crisis.

Sin embargo, comparadas una a la otra las propuestas de Dalmau Ramírez, candidato del Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), son más detalladas y, además de presentar un documento más extenso que el de su contrincante y provee mayor contexto a las problemáticas presentadas, ya que su visión es reformar de pies a cabeza las estructuras de Gobierno hasta crear una “Patria Nueva” y demostrarle a los lectores cómo la proyecta.

Como ejemplo, ambos creen en aumentarle el salario a los maestros del sistema de educación pública.

Sin embargo, solo Dalmau Ramírez especificó que pretende aumentar el salario básico a $3,000 mensuales, con diferenciales concedidos por preparación académica, experiencia y desempeño, a toda vez que busca ajustar el aumento escalonado del salario básico a $4,000 en un periodo que no exceda cuatro años. También propone pagarle dietas y millaje a los docentes que dan servicios a estudiantes en el hogar («home bound»).

El aspirante a la gobernación por el PIP cree en reformular la protección ambiental actual para batallar de forma más agresiva los efectos del cambio climático; en establecer cursos educativos sobre derechos humanos, la erradicación del racismo y la xenofobia, así como un currículo con perspectiva de género; y en derogar leyes emblemáticas de los pasados cuatro años, como la Reforma educativa, la Reforma laboral y las altamente criticadas leyes de transparencia y datos abiertos.

Su plan —el primero de los aspirantes a la gobernación en publicarse— es minucioso al detallar asuntos como su política ambiental de sustituir el plástico por productos en vidrio y otros materiales, la prohibición de incineradores y el llamado “impuesto al sol” a personas que interesen instalar sistemas de energía renovable en sus hogares.

Pierluisi Urrutia, como contraste, no prohibe ese tipo de impuesto, pero aclara que no debe ser uno oneroso. Tampoco prohibe las incineradoras ni aboga por sustituir el plástico, aunque sí habla de cumplir con la meta de que el 40% de la generación de energía provenga de fuentes renovables para el 2025. Asegura, además, que cumplirá con la ley que prohíbe el uso y depósito de cenizas en Puerto Rico.

El candidato del Partido Nuevo Progresista (PNP) basa su plan en la reconstrucción y potenciación de las estructuras ya existentes para impulsar un cambio en Puerto Rico. Entre las páginas de su plan, promueve la continuación de iniciativas que se implementaron bajo el mando del gobernador renunciante Ricardo Rosselló Nevares o replicar la manera en que la gobernadora Wanda Vázquez Garced ha atendido los efectos de la pandemia del COVID-19 en el turismo.

Entre ellas se encuentra continuar con la promoción del Código de Incentivos y el programa de Zonas de Oportunidad, expandir la inversión en la industria aeroespacial, establecer la Oficina del Principal Oficial Financiero bajo una sombrilla liderada por el Departamento de Hacienda, continuar el cumplimiento con la Ley de Política Energética y seguir el desarrollo de la industria de los “E-sports” y el “E-Gaming”.

El documento comienza con medidas de desarrollo económico y el uso de fondos federales para la reconstrucción de la Isla tras los huracanes Irma y María en el 2017, que contestan parte de la pregunta sobre cómo subvencionará sus propuestas. En el caso de Dalmau Ramírez, algunas ideas serían subvencionadas con fondos nacionales de nueva creación, fondos existentes y federales.

El único énfasis histórico que destaca es la crisis económica que sitúa en el 2006, bajo la administración de Aníbal Acevedo Vilá, actual candidato a Comisionado Residente en Washington y contrincante de Jenniffer González Colón, que también tiene una aparición en el plan de Pierluisi Urrutia.

Aunque ambos planes pecan de redundantes en ocasiones, también comparten secciones dedicadas a las mujeres y a promover su desarrollo laboral, a personas que se identifican como LGBTIQA+, a las iglesias y a las comunidades con base de fe.

En cuanto al estatus, Pierluisi Urrutia aboga por la estadidad y por acudir al Congreso de los Estados Unidos a exigirla como medida de igualdad y justicia social para los puertorriqueños como ciudadanos americanos.

Dalmau Ramírez, por su parte, como militante de la independencia propone una asamblea para la Descolonización de Puerto Rico en representación de la soberanía puertorriqueña que negocie con el Congreso y el Gobierno de los Estados Unidos una alternativa descolonizadora y sus periodos de transición. Luego, serán sometidas a votación al pueblo de Puerto Rico para su determinación final.

Lea los planes de ambos, de cara a las elecciones del 3 de noviembre:

Plan de Pierluisi:

Plan de Dalmau: