Cambian los virus cibernéticos
La detección de un virus para el sabotaje industrial y la guerra cibernética, el Stuxnet, ha confirmado a los expertos en seguridad que el panorama de los patógenos digitales está cambiando.
Para Manuel Medina, director del exCert de la Politécnica de Cataluña en España, "los creadores de virus buscan como objetivo prioritario el robo de información, no la destrucción de la máquina", y ello conduce a que eviten para sus creaciones la notoriedad que parecían buscar en otras épocas.
Ha cambiado la arquitectura de los virus y su autoría. Los más dañinos no son obra de un informático malicioso. "Son tan complejos que piden mucha inversión. Se necesita un fuerte patrocinio", comenta Luis Corrons, del laboratorio de Panda, "y eso conduce a servicios secretos, grupos terroristas, mafias... Antes, el virus aprovechaba una vulnerabilidad. Stuxnet recurre a varias para un mismo ataque y eso dispara el coste", según el diario español El País.
Este espécimen, además, busca ser invisible a la máquina infectada. "El bicho está diseñado con un especial poder de propagación". En este caso singular, el objetivo era lesionar gravemente una instalación industrial. Las centrales nucleares iraníes lo han padecido.
Panda ha hecho un estudio sobre el panorama de las intrusiones y contagios. De momento, 2010 se cierra con una producción de malware (programas maliciosos) superior a 2009. Su base de datos almacena 60 millones de amenazas.
Por otra parte, no siempre el éxito se basa en un código intruso. La llamada ingeniería social -engaño a una persona para que suministre datos y contraseñas personales- sigue siendo una táctica muy usada.
Durante 2010 ha habido ataques que han usado Twitter y Facebook como "cuartel general". Para 2011 el uso de redes sociales como método de distribución crecerá.
"En 2011 veremos no solo cómo se consolidan las redes sociales como herramienta para los hackers, sino que seguirán creciendo en cuanto a ataques distribuidos. Las tabletas no serán, por el momento, un objetivo prioritario y crecerá el malware en los móviles, pero no en una cantidad llamativa".