La actual directora ejecutiva del centro hospitalario San Juan Capestrano, Marta Rivera Plaza, que durante la mañana del sábado se convirtió en la primera mujer presidenta de la Asociación de Hospitales de Puerto Rico (AHPR) de los últimos 31 años, expresó, como primer mensaje de su nuevo mandato, su preocupación ante los retos que puede traer la Junta de Control Fiscal y la próxima administración de gobierno de cara a la presentación de datos unificados referentes al sector de la salud.

‘Al asumir la presidencia estoy invitando a mis colegas, administradores de facilidades de salud, médicos y todo el personal de los hospitales a que se unan para lograr remover las barreras que impiden la recolección de datos, iniciativa que permitirá la obtención de información precisa de nuestra industria para trabajar en áreas como política pública y solicitud de fondos’, declaró la presidenta.

Abundando en esta perspectiva, Rivera Plaza defendió mediante declaraciones escritas que, ‘de igual manera, es necesario tener los datos, la información correcta, de lo que acontece en la industria de la salud, muy en especial de los hospitales, para poder asumir posiciones ante la Legislatura y el Gobierno, tanto estatal como federal, lo que nos dará una mejor oportunidad para defender nuestra industria con información correcta’.

La líder criticó también la inequidad existente entre las ayudas procedentes de fondos federales destinados a territorio continental y Puerto Rico en materia de salud pública, y reincidió en la alarma suscitada ante el posible vencimiento del Programa de Salud del Gobierno en agosto del próximo año. ‘Nuestra Asociación ha venido luchando por muchos años (con) la necesidad de eliminar la inequidad en los programas federales. En otras palabras, desde hoy comienza nuevamente la lucha para reducir la brecha entre lo que se le da a un Estado y lo que se le otorga finalmente a Puerto Rico. (…) Trabajaremos para restablecer el dinero del ‘OBAMACARE’, para el financiamiento del Programa de Salud del Gobierno’, anunció.