La medida guarda silencio absoluto sobre su impacto fiscal.

El gobernador Pedro Pierluisi estampó su firma en el Proyecto de la Cámara 2172, que enmienda el Código de Incentivos (Ley 60-2019) para crear lo que se conocerá como el concepto de “Inversión Elegible en Centro Urbano” a la lista de categorías que cualifican para beneficios.

La pieza legislativa del representante popular Jesús Santa Rodríguez también incluye otros conceptos como Costo Total del Proyecto en Centro Urbano, que son costos directos de construcción, gastos por compra de muebles, instalaciones y equipo, emisiones de deuda para obtener capital, entre otros.

La evaluación del proyecto no contó con un análisis de impacto fiscal.

El proyecto fue presentado el 30 de mayo y el último día para aprobar medidas en la última Sesión Ordinaria del cuatrienio es el 25 de junio.

Para que un negocio cualifique para una exención tendrá que demostrar que el proyecto tiene un costo de más de $1 millón -excluyendo el costo de la compra de propiedades-, que la propiedad adquirida esté en estado de abandono (solar o estructura en desuso, desocupada o con fallos de construcción) y que el proyecto habilita al menos siete unidades residenciales.

Los negocios que cualifiquen tendrían acceso a la tasa fija preferencial de 4% aplicable a los ingresos como la venta o el arrendamiento del proyecto. Los socios de la corporación no estarían sujetos a contribución sobre ingresos en la distribución de dividendos o beneficios del ingreso exento.

Además, el proyecto le reconoce una exención del 75% sobre contribuciones municipales.

Esto tendría un impacto sobre las arcas de los gobiernos municipales.

La medida también le reconoce a estos negocios un crédito contributivo de 40%.