Alberto Cutié, que abandonó la Iglesia católica para entrar en la episcopal tras un sonado escándalo, considera que la jerarquía católica actúa con hipocresía al permitir secretamente relaciones homosexuales y heterosexuales, mientras que públicamente lo rechaza.

"Hay tantos homosexuales, tanto activos como célibes, a todos los niveles del clero y de la jerarquía que la Iglesia (católica) no tendría capacidad de funcionar si todos ellos fuesen excluidos", afirma Cuité, ahora miembro de la Iglesia episcopal, en un libro que sale este martes a la venta.

Cutié abandonó a mediados del año 2009 la Iglesia católica al romper el voto del celibato y mantener relaciones sexuales con Ruhama Canellis, con quien se casó por el rito de la Iglesia episcopal de la que es sacerdote.

Año y medio después de la controversia iniciada al ser publicadas unas fotos del entonces sacerdote católico besándose en una playa con Canellis y mantener una duro enfrentamiento con el arzobispado de Miami, Cuité escribió un libro en el que critica a la Iglesia católica por promover "viejas ideas".

"Dilema: la lucha de un sacerdote por fe y amor", es el título del libro escrito por Cutié, que tras abandonar la Iglesia católica se pasó a la Episcopal.

Cutié afirma que el mantenimiento del celibato por la Iglesia católica ha llevado a que se produzcan tantos escándalos de abusos sexuales a niños.

En el libro, Cutié narra cómo comenzó a distanciarse de la doctrina católica y el aumento del descontento con la jerarquía católica porque estaban excesivamente preocupados de su propia imagen.

Igualmente explica cómo se enamoró de la que hoy es su esposa y con la que tuvo una hija en noviembre de 2009.