Libios se burlan de Gaddafi
El este de Libia, que vivió atemorizado durante cuatro décadas por el gobierno opresivo de Muammar Gaddafi, está ahora inundado de caricaturas y bromas sobre el líder, lo que ayuda a la población a dejar atrás el culto a su personalidad y el temor hacia su aparato de seguridad.
En Bengasi, la segunda ciudad libia, una caricatura en la pared de un edificio estatal retrata al dirigente libio como 'superladrón', con un traje de Superman con el símbolo del dólar en el pecho en vez de la 'S' y otra lo muestra dentro de un cubo de basura que lleva escrita la palabra 'historia'.
Tras 41 años de poder absoluto, Gaddafi ha visto cómo su poder ha ido disminuyendo ante una oleada de protestas, pese a sus desafiantes apariciones en televisión la semana pasada, una de ellas realizada en una furgoneta y con un gran paraguas.
La población dice que las bromas en el este de Libia han sido tan exageradas porque llegan como consecuencia del enorme miedo al Gobierno de Gaddafi y a sus fuerzas de seguridad, además de por la casi inexistente oposición.
El excéntrico estilo de Gaddafi, su gusto por los trajes sueltos o uniformes militares y por guardaespaldas femeninas, ha dado a los dibujantes y el pueblo mucho material para mofarse.
En el paseo marítimo de Bengasi, un joven ataviado con una peluca descuidada a lo Gaddafi, gafas de aviador y un paraguas se paseaba en la parte trasera de un camión, algo que casi paralizó el tráfico ante la risa de los presentes y el estruendo de las bocinas de los carros.
'Estamos desahogándonos, expresándonos. No sólo cometió crímenes militares, sino contra nuestras mentes', dijo la profesora Fatima al-Shaksy, de 42 años.