Tiembla Japón a un mes del terremoto
Hoy, cuando se cumple un mes del peor terremoto y posterior tsunami registrado en Japón, ha vuelto a temblar. Esta vez ha sido un terremoto de magnitud 7.1 en la Escala de Richter con epicentro en la costa este del país, por debajo de la provincia de Fukushima, en la provincia de Iwaki. La agencia Kyodo informa que se ha decretado una alerta de tsunami en el Pacífico.
Tepco ha informado de que, de momento, no se han reportado daños en la central nuclear de Fukushima, y que se ha seguido el protocolo habitual en este tipo de situaciones: evacuación del personal y corte en el suministro eléctrico, que mientras ha estado cortado ha obligado a refrigerar los reactores con agua lanzada desde coches de bomberos, publica el diario español El País.
Un mes después de la tragedia, en todo el país se ha guardado un minuto de silencio a la hora exacta en la que ocurrió, mientras en Fukushima se sigue luchando para controlar el desastre nuclear.
Y con motivo de este aniversario, Masataka Shimizu, presidente de la compañía gestora de la central nuclear, Tokyo Electric Power (Tepco), se encuentra en la zona de la catástrofe para pedir perdón a todos los afectados por la situación. Sin embargo, según informa la agencia de noticias local Kyodo News, el gobernador de la provincia, Yuhei Sato, se ha negado a recibirle.
Mientras tanto, el Gobierno ha decidido evacuar a la población más expuesta a la radiación, incluso traspasando el límite de los 20 kilómetros de la central que inicialmente impuso el Ejecutivo, informa Reuters.
Yukio Edano, portavoz del Gobierno, explicó en conferencia de prensa que evacuarán las zonas que acumulen más de 20 milisiverts en un periodo de un año. Así se va a hacer en Iitate, una localidad a 40 kilómetros de la planta, como también en algunas zonas de la ciudad de Kawamata y otras áreas. 'No hay necesidad de evacuar inmediatamente', ha matizado, aunque ha dicho que lo ideal sería proceder en un periodo no más largo que un mes.
En la central se continúa la lucha para contener la fuga de radiación sin éxito. Tras el vertido de agua radiactiva que comenzó el lunes de la semana pasada y ya ha concluido, la la Agencia de Seguridad Nuclear e Industrial de Japón ha autorizado hoy el drenaje de 700 toneladas de agua muy radiactiva que inundan una fosa cercana al reactor 2 de la central, a fin de agilizar los trabajos para restaurar su maltrecho sistema de refrigeración, informa Efe citando a la agencia local Kyodo.
Está previsto que Tepco comience hoy a bombear ese agua para trasladarla a un depósito en el edificio de turbinas de esa misma unidad, con capacidad para 3,000 toneladas de agua, normalmente destinado a convertir en líquido el vapor que origina el reactor.