Alarmas para mucamas en NY
Los hoteles de lujo de New York le darán a sus camareras de servicio o mucamas alarmas inalámbricas para prevenir futuros ataques sexuales. La medida surgió ya que unas cuantas camareras de hotel han dicho que a menudo sienten cierta inquietud cuando deslizan la tarjeta para abrir la puerta y entrar a limpiar un cuarto.Con qué se pueden encontrar?
Argelia Rico se topó con un hombre desnudo que se masturbaba viéndola. Kimberly Phillips apenas abrió la puerta le saltaron encima dos perros que le mordieron una pierna.
Y días pasados, el ex director del poderoso Fondo Monetario Internacional, Dominique Strauss-Kahn, fue acusado de agredir sexualmente a una camarera en su suite de $3,000 la noche en el Hotel Sofitel en New York.
Grupos de trabajadores y de camareras de hotel han reportado por lo menos otros 10 ataques en Estados Unidos en los últimos años, desde Gaithersburg en Maryland, un suburbio de la capital, Washington, hasta la remota Grand Island, en Nebraska.
El Sofitel -donde ocurrió el hecho denunciando contra Strauss-Khan- y el Pierre han adelantado ya que equiparán a sus empleadas con 'botones de pánico' -similares a los dispositivos de emergencia médica- para que avisen a los servicios de seguridad al menor indicio de acoso.
'La idea es extender los dispositivos de todos los hoteles de la ciudad como parte de protección laboral y en el próximo convenio colectivo', ha adelantado John Turciano, portavoz de seguridad del New York's Hotel <><><><><><><>& Motel Trades Council, que representa a unos 30,000 trabajadores de la hostelería.br /br /'Va siendo hora de que los viajeros que vienen a New York vayan tomando nota', advierte en declaraciones al 'Wall Street Journal' el presidente de la asociación, Peter Ward. 'La persona que se encarga de la limpieza de la habitación tendrá un botón de alarma que podrá apretar en cuanto alguien se comporte de una manera estúpida o inapropiada'.br /br /Según Ward, las detenciones del ex director del FMI Dominique Strauss-Kahn y del banquero egipcio Abdel Salam Omar son la punta del iceberg de un problema bastante habitual, sobre todo en los hoteles de lujo.br /br //p