Cumbre del Consejo de Seguridad sobre la 'primavera árabe'
Naciones Unidas - El Consejo de Seguridad de la ONU celebra mañana una cumbre ministerial de alto nivel dedicada inicialmente a analizar los cambios en Oriente Medio en el marco del primer aniversario del comienzo de la 'primavera árabe', pero donde todos asumen que la crisis siria será la gran protagonista.
'Será una oportunidad para que todos los miembros expresen su opinión sobre cuál debe ser la salida a la crisis en Siria', dijo a Efe una fuente diplomática del máximo órgano de seguridad de la ONU, que en el año que dura la ola de represión del régimen de Bachar al Asad ha sido incapaz de manifestarse en forma de una resolución.
El encuentro reunirá a los máximos responsables de la diplomacia internacional: además del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, participarán la secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton, y el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, quienes mantendrán además un encuentro bilateral en Naciones Unidas.
También estarán presentes los titulares de Exteriores francés, Alain Juppé, y el británico, William Hague, quien presidirá la cumbre ya que el Reino Unido ocupa la presidencia del Consejo durante marzo, así como varios representantes de países árabes.
'Esperamos que se produzca un debate intenso', indicó otra fuente diplomática del Consejo, donde la pregunta es si la división entre sus cinco miembros permanentes -China, EE.UU., Francia, Reino Unido y Rusia- sobre cómo actuar ante una crisis que se ha cobrado ya más de 7,500 muertos, según datos de la ONU, seguirá sobre la mesa o bien se mostrarán signos de acercamiento.
Rusia y China han ejercido hasta la fecha su poder de veto contra dos proyectos de resolución, uno de firma occidental el pasado octubre y otro presentado por Marruecos en nombre de los países árabes en febrero.
Durante esta semana los representantes de los cinco miembros permanentes y el de Marruecos han mantenido encuentros informales para tratar de sacar adelante un nuevo proyecto de resolución presentado esta vez por EE.UU., que pide el cese de la violencia, primero al Gobierno y luego a la oposición, y el acceso inmediato de los trabajadores humanitarios.
Después de que Rusia y China no dieran su visto bueno al texto, Lavrov acordó el sábado en El Cairo en una reunión con los ministros de la Liga Árabe un plan de cinco puntos para solucionar la crisis siria que quieren llevar a la ONU.
La propuesta contempla el cese de la violencia, 'sea cual sea su origen', la creación de un mecanismo neutral que supervise un alto el fuego y la no intervención extranjera, y estipula la llegada de ayuda humanitaria 'sin obstáculos' además de respaldar la misión del enviado especial conjunto de la ONU y la Liga Árabe a Siria, Kofi Annan.
Muy presente tendrán precisamente los miembros del Consejo en su encuentro del lunes la visita a Damasco de Annan, quien este fin de semana ha mantenido dos encuentros con Al Asad, a quien ha animado a detener la violencia e iniciar el diálogo con las fuerzas de la oposición.
Al Asad rechazó en primera instancia que un diálogo o proceso político puedan tener éxito, 'mientras existan grupos terroristas armados que trabajan para propagar el caos y la inestabilidad en el país atacando a civiles y militares y saboteando propiedades públicas y privadas'.
La ONU aprovechará, además, la presencia de Clinton y Lavrov, y acogerá también el lunes una reunión del Cuarteto para la Paz en Oriente Medio (EE.UU., Rusia, Naciones Unidas y la Unión Europea), que coincide con una nueva espiral de violencia en Gaza y el sur de Israel, después de que las fuerzas israelíes mataran al secretario general de los Comités Populares de Resistencia, Zuhair al Qaisi.
Como respuesta, en el sur de Israel han caído más de cien cohetes en las últimas horas, mientras que al menos quince milicianos palestinos han perdido la vida como respuesta a esas acciones.