Al menos una persona ha muerto y otras cuatro están desaparecidas en Australia a causa de los incendios forestales que arden sin control en el suroeste del país y que han arrasado más de 40 casas, informaron hoy fuentes oficiales.

El fallecido murió ayer por hipertermia mientras realizaba trabajos preventivos en el techo de su vivienda para protegerla de un fuego que ardía en el Parque Nacional John Forrest pero que finalmente no afectó la zona habitada.

El foco principal de estos incendios comenzó el domingo por la mañana en la localidad de Parkeville y se expandió rápidamente hacia Stoneville y Mount Helena, en el municipio de Mundaring, situados a unos 30 kilómetros al este de Perth, la capital del Estado de Australia Occidental.

Las autoridades indicaron que cuatro personas están desaparecidas y que 46 casas han quedado calcinadas, la mayoría en Stoneville, donde las llamas alcanzaron los 20 metros de altura.

Los bomberos -varios de los cuales tuvieron que ser atendidos por la fatiga causada por el calor- pudieron contener durante la noche el incendio que ha calcinado unas 650 hectáreas en Mundaring, aunque este sigue ardiendo fuera de control.

El Gobierno de Australia Occidental destinará 902,600 dólares a un fondo de emergencias creado por este municipio a raíz de los incendios.

Estos incendios ocurren en medio de una ola de calor que el sábado alcanzó los 44 grados Celsius en Perth y que ahora se desplaza por el sur del país, donde los pronósticos apuntan a temperaturas de más de 40 grados esta semana en Adelaide y Melbourne.

En 2011, un incendio forestal en los alrededores de Perth destruyó más de 70 casas, causó daños en más de una treintena y causó el hundimiento de un puente de una autopista que quedó cortada durante un mes.