Familiares de Corea del Norte y Corea del Sur intercambiaron hoy regalos en el centro turístico del monte norcoreano Kumgang, donde se celebra la segunda jornada de una histórica reunión entre parientes de ambos lados separados por la guerra.

‘Los surcoreanos han entregado principalmente ropa y medicamentos’ a sus familiares del Norte, informó a Efe una portavoz del Ministerio de Unificación de Seúl tras señalar que la cita se está llevando a cabo según lo previsto.

Otro de los regalos más comunes fue el simbólico y popular Choco pie, un bizcocho relleno de malvavisco y recubierto de chocolate fabricado por una empresa de confitería surcoreana que según los testimonios es altamente valorado en el mercado negro de la hermética Corea del Norte.

Algunos de los surcoreanos mostraron sus regalos a la prensa, como Kim Dong-bin, de 80 años, quien entregó a sus hermanos menores dos bolsas de deportes llenas de cosméticos, chocolate, medicinas, jabones y ropa.

A cambio recibió tres botellas de un licor que, según aseguraron sus familiares del Norte, había sido preparado por el mismísimo ‘líder supremo’ del país, Kim Jong-un.

Un total de 82 surcoreanos, la mayoría ancianos acompañados por familiares cercanos, se reúnen entre los días 20 y 22 con más de un centenar de parientes del Norte a los que no veían desde la Guerra de Corea (1950-53), en la primera de las dos rondas de la histórica reunión familiar.

El intercambio de regalos tuvo lugar esta mañana durante la única reunión de dos horas en la que los familiares pudieron encontrarse en privado, ya que el resto de los encuentros son colectivos.

Los medios surcoreanos han dado de momento una amplia cobertura al reencuentro familiar, mientras en Corea del Norte la agencia estatal KCNA mantuvo un silencio absoluto y ni siquiera informó del comienzo de este evento humanitario.

Mañana sábado los solicitantes surcoreanos se despedirán de sus parientes y del domingo 23 hasta el martes 25 serán los 88 candidatos norcoreanos quienes se citarán con hasta 360 familiares del Sur.

Se espera que el histórico reencuentro familiar, el decimonoveno en la historia y el primero en tres años, abra las puertas a una etapa duradera de paz y entendimiento entre las dos Coreas tras años de tensión.

Desde que la Guerra de Corea (1950-53) confirmara la división en dos de la península en el Norte comunista y el Sur capitalista, cientos de miles de coreanos no han podido recuperar el contacto con sus parientes del otro lado de la frontera.