El Gobierno de Corea del Sur se marcó hoy el objetivo de completar el próximo sábado las labores del rescate y recuperar los más de 30 cuerpos que quedan en el buque Sewol, hundido hace 22 días con más de 300 muertos o desaparecidos.

‘Los responsables de la búsqueda deben hacer todo lo posible para que las tareas (de rescate) concluyan el día 10’, declaró el primer ministro surcoreano, Chung Hong-won, en una reunión con altos funcionarios de Seúl, según declaraciones recogidas por la agencia Yonhap.

Los servicios de rescate, que siguen recuperando cuerpos del interior del barco, ya expresaron esta mañana su intención de ampliar la búsqueda en los próximos cuatro días a las dependencias todavía inexploradas, como algunas habitaciones, salas de karaoke, uno de los comedores y una sala de estar.

Hasta ahora han sido confirmadas las muertes de 268 de las 476 personas que viajaban en el Sewol mientras 34 siguen en paradero desconocido, aunque se cree que sus cadáveres permanecen atrapados dentro del buque sumergido en aguas al suroeste del país.

Se espera que en lo que queda de esta semana la mejora de las condiciones del tiempo y el mar permita a los buzos avanzar en el rescate, ya que la marea baja ha suavizado las olas y las corrientes marinas y el viento ha perdido fuerza.

Mientras, las autoridades de Corea del Sur siguen inspeccionando a la operadora del ferri tras detectar presuntas irregularidades en sus actividades, como parte de la investigación del suceso.

Hoy salió a la luz que Cheonghaejin Marine trató de vender el barco este año, lo que ha despertado especulaciones de que la compañía sabía que la nave tenía problemas de equilibrio.

El Sewol sufrió una remodelación hace dos años para aumentar su capacidad, lo que según testimonios podría haberlo desequilibrado.

Los pasados días algunos responsables de la naviera fueron detenidos por presuntamente haber cargado el barco con más del doble de su capacidad el día del siniestro.

El capitán y varios tripulantes, por otra parte, están acusados de abandonar el buque sin atender a la seguridad de los pasajeros.

Con las posibilidades de hallar supervivientes totalmente descartadas, el naufragio del Sewol apunta a ser una de las mayores tragedias de la historia de Corea del Sur al dejar una cifra virtual de 302 muertos, la mayoría adolescentes de 16 y 17 años que realizaban un viaje escolar.