A pesar de que sus posturas a favor del ?Sí? no salieron favorecidas en el referendum que buscaba limitar el derecho a la fianza y reformar el poder legislativo, al final de la noche, tanto el gobernador Luis Fortuño, como el candidato popular a la gobernación, Alejandro García Padilla, reclamaron sendas victorias y comenzaron su peregrinaje hacia noviembre proyectándose como ‘líderes ejemplares’.

En conferencias de prensa separadas en sus respectivos comités políticos, los dos principales candidatos a la gobernación dejaron constatado que, por más que lo negaran en las pasadas semanas, el referéndum fue utilizado por ambos como un barómetro electoral de cara a lo que más les ha importado desde el saque: la oportunidad por regir los destinos del país desde la Calle Fortaleza en San Juan.

Mientras la mayoría de los favorecedores del ‘No’ se nutrían de un sacrificado trabajo de base alimentado por el ingenio y la convicción, las expresiones que tanto Fortuño y García Padilla hicieron tras conocerse el resultado del referéndum demostraron que su agenda veraniega fue una de puro fogueo electoral, por encima de cualquier implicación constitucional del referéndum.

En resumidas cuentas, ni el gobernador ni su principal opositor político aceptaron derrota en esta ocasión. Por el contrario, ambos celebraron su imaginada victoria, y con sus respectivos comentarios de gozo, hasta nos hicieron recordar el resultado de la elección de 2004, cuando nadie ganó ni perdió, pero tanto el PNP como el PPD dijeron haber salido airosos al final de la consulta.

‘Luchamos con principios, damos frente y creemos firmemente que cuando tenemos que pesar los derechos de las víctimas del crimen frente a los derechos de los acusados, lo siento mucho, pero yo me voy del lado de las víctimas y sus familiares’, dijo Fortuño frente a un entusiasta grupo de novoprogresistas que congregó en el comité central de la colectividad y alzó su voz con el grito de ‘cuatro años más’.

‘Cuando uno defiende principios ni se gana ni se pierde, se enorgullece y se enaltece’, añadió el Primer Ejecutivo.

García Padilla no se quedó atrás y desde su comité central en Puerta de Tierra se dirigió al país reclamando ser un líder con nuevos estilos de gobernanza debido a su decisión de no imponer una posición institucional a los miembros de su partido, quienes quedaron libres de favorecer una opción u otra en el referéndum.

‘Yo como presidente (del PPD) senté la pauta y le pedí a todo popular que defendiera lo que su conciencia le dictara. Yo respaldé que ‘Sí’ dos veces. Y eso no fue un discurso, lo demostré con hechos esta mañana. Este es un partido democrático y se demostró que hay democracia. Aquí está mi compañero de papeleta, Rafael Cox Alomar, y él votó hoy como votó mayoritariamente el país. Votamos distinto. Mi decisión fue darle espacio y lo demostré, que no era un mero discurso’, expresó García Padilla.

‘Esta no era una contienda ideológica’, prosiguió. ‘No era una contienda partidista del Partido Popular. Se le dijo a cada cual en el PPD que ejerciera como quisiera. Nosotros sabemos qué queremos para Puerto Rico y sabemos lo que Puerto Rico piensa, porque no nos sentimos extranjeros en nuestra tierra. Le vamos a meter mano al crimen y al desempleo, sin excusas y sin dejarlo para el final del cuatrienio. Habiendo terminado con el proceso con el que querían distraernos, vamos a lo que vinimos: Vamos a ganar las elecciones el 6 de noviembre!’, puntualizó García Padilla, a la vez que aprovechaba para ‘enviarle un abrazo y mis respetos a los observadores de colegio del PPD’, pues, supuestamente, ‘hubo más colegios en los que el PPD tuvo más observadores que funcionarios’.

Sin duda, la conclusión del referéndum marca el fortalecimiento de las campañas al entrar en la recta final de cara a la elección general que se celebrará el 6 de noviembre.

Mientras Fortuño y García Padilla cerraban la noche en sus respectivos universos paralelos a la realidad, el país observó un proceso ganado por movimientos no tradicionales.

Para los líderes de los partidos principales, el proceso terminado hoy tenía que ver más con su camino hacia noviembre que con los problemas del país. Resta ver, precisamente en noviembre, si lo de hoy fue una muestra de por dónde va el país, o sólo un paréntesis.