El contador está en un hogar de adaptación en la antesala de cumplir con sentencia de nueve años.

Lutgardo Acevedo López, uno de los protagonistas del hasta ahora único caso de corrupción judicial que las autoridades federales han radicado bajo una muy celebrada, pero casi estéril campaña de investigación de corrupción en los tribunales de Puerto Rico, está a punto de cumplir su condena de nueve años y salir a la libertad.

Después de que ayer trascendieran fotos del contable junto con sus hijos, NotiCel confirmó que Acevedo López entró a un hogar intermedio a mediados del mes pasado, como parte del proceso de reintegración a la sociedad en la recta final de cumplir con una condena que termina oficialmente el 31 de enero de 2022.

Acevedo López y el exjuez Manuel Acevedo Hernández protagonizaron uno de los casos de corrupción más notorios de este siglo que giró alrededor de los sobornos que el contable pagó al entonces juez para que decidiera a su favor en un caso de homicidio involuntario que enfrentó tras arrollar en estado de embriaguez al guardia de seguridad Félix Babilonia.

Tras un juicio, el exjuez fue encontrado culpable y recibió sentencia de 10 años, mientras que Acevedo López se declaró culpable y recibió sentencia de nueve años. Ambos apelaron, pero en las dos ocasiones el Primer Circuito de Apelaciones sostuvo las sentencias.

La historia de Acevedo López es una de rápido ascenso, durante el que mercadeó su negocio de servicios contributivos rodeado de deportistas, personalidades y políticos, y de caída estrepitosa, con acusaciones tanto a nivel estatal como federal y una profunda depresión que lo llevó, incluso, a atentar contra su vida.

El hombre de 46 años se convirtió en la cara de una campaña federal bajo la que el Negociado Federal de Investigaciones (FBI) supuestamente dedicaría una nueva escuadra de sus agentes solamente a investigar corrupción judicial en la isla. Pero, a casi 20 años de la promesa, el único caso que se conoce es, precisamente, el de Acevedo López y Acevedo Hernández.

Tan reciente como hace un mes, el juez jefe de la oficina del FBI en la isla, el puertorriqueño y también contador público, Joseph González, volvió a prometer que reactivaría la escuadra de corrupción judicial que, al anunciarse en 2013, provocó incluso confrontación pública entre las autoridades federales y el entonces Juez Presidente del Tribunal Supremo, Federico Hernández Denton.

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