Guardaespaldas de Jackson ayudó a esconder el Propofol
Alberto Álvarez, el guardaespaldas de Michael Jackson, confirmó que ante la desesperada petición del doctor Conrad Murray, lo asistió a esconder vías y frascos en una bolsa luego de que el cantante colapsara la mañana del 25 de junio.
'Me pidió que pusiera varios frascos en una bolsa azul', testificó Alvarez ante el interrogatorio del fiscal David Walgren durante el tercer día de juicio. 'Creí que el doctor Murray tenía las mejores intenciones con Jackson y no cuestioné su autoridad en ese momento. Por eso seguí sus instrucciones', aseguró Álvarez.
Lo que no pudo evitar fue que Paris, la hija del cantante, de 12 años, contemplara la impactante escena de su padre tirado en la cama, inmóvil. Murray gritó que había que llevar a Jackson a un hospital y en ese momento advirtió la presencia de la niña llorando por su padre.
El guardaespaldas dijo que está seguro de que Paris pudo verle la cara al rey del pop justo después de que sufriera un ataque cardíaco, una situación a la que Murray reaccionó. 'No dejes que vean a su padre de esa manera', indicó alertando también de la presencia de Prince, el hijo mayor de Jackson, en el dormitorio.
Así que Álvarez decidió removerlos del lugar, bajando al segundo piso, una versión que confirmó ayer el asistente personal del artista, Michael Williams. Después regresó a la habitación para averiguar qué le había pasado al intérprete de 'Thriller'. 'Tuvo una mala reacción', le explicó el médico de origen caribeño.
Nervioso, Álvarez siguió instrucciones para guardar todo el instrumental médico de Murray en bolsas, incluyendo frascos de una sustancia lechosa que el jefe de seguridad del cantante cofirmó que era Propofol. 'Pensé que nos estábamos preparando para ir al hospital', añadió.