Nueva York – Un día soleado y brisa tenue acompañaron la alegría de cientos de miles de puertorriqueños que a ritmo de salsa, así como de la bomba y plena, ritmos autóctonos del país, celebraron hoy su tradicional desfile en Nueva York.

El festejo de esta comunidad, tanto de los residentes en EE.UU. como los que viajan desde Puerto Rico, encabezados por un gran número de alcaldes, recorre cada año la famosa Quinta Avenida, que, como ocurrió hoy, se torna azul, blanca y roja, ya que, con orgullo, despliegan en ella su bandera.

Desde temprano en la mañana, los puertorriqueños como Liseth Vargas, y otros latinos que han hecho suyo este multitudinario evento, se ubicaron a lo largo de la avenida, llevando su bandera en la mano, o mostrando el emblema nacional en su ropa, que también pintaron en su rostro, pulseras, collares o hasta en un corte de cabello.

‘Vengo desde hace siete años con mi hijo Jaime y llego temprano para coger un buen espacio. Nos encanta porque es nuestra raza y para compartir lo nuestro, dijo a Efe Vargas, quien calificó el evento de ‘extraordinario’.

Este año el desfile se llevó a cabo bajo el lema de ‘Los puertorriqueños y la educación superior’, para poner de relieve su aportación en ese campo en la ciudad, donde fundaron el Hostos Community College, que es parte del sistema de universidades públicas de la ciudad (CUNY) y cuyo presidente, Félix Matos, fue el gran mariscal.

Además, fundaron el Centro de Estudios Puertorriqueños en el Hunter College y el Boricua College, así como el programa de educación bilingüe en las escuelas públicas de Nueva York que beneficia a cientos de jóvenes inmigrantes.

‘Qué bonita bandera es la bandera puertorriqueña’, cantaban eufóricos al unísono los boricuas, que además gritaban ‘yo soy boricua pa’que tú lo sepas’, mientras levantaban sus banderas, y contorneaban sus cuerpos al ritmo de la salsa, o de la bomba y la plena, que reinaron hoy en la 55 edición del desfile, dedicado al municipio de Guayama (en el sur de Puerto Rico), en el 276 aniversario de su fundación.

Los espectadores disfrutaron además de personajes del folclor de la isla como los vejigantes, con sus coloridos atuendos y máscaras con cuernos, así como de los cabezudos, y de hombres y mujeres en zancos, ejemplo de la fusión de la herencia africana y española en la isla, que se movían al son de la bomba y plena.

Los boricuas no dejaron hoy en casa literalmente ni al perro, a los que también vistieron con su bandera, y estar en una silla de ruedas tampoco impidió que otros acudieran al evento, que cada año reúne a más de un millón de espectadores.

Por ser este un año electoral, el encuentro con los puertorriqueños, que entre los latinos son el mayor número de votantes en esta ciudad, fue una cita obligada para políticos como el veterano congresista de EE.UU., Charles Rangel, de 81 años, y también para quien le está retando en las urnas, el senador estatal de Nueva York, Adriano Espaillat.

También se dieron cita Nydia Velázquez y José Serrano, únicos puertorriqueños en el Congreso.

‘Es una emoción poder estar aquí en solidaridad (con su comunidad), ver su expresión, su influencia política’, dijo a Efe Velázquez, que también se enfrentará a las primarias.

Entre los artistas que asistieron al desfile estuvo el actor colombiano que creció en la Gran Manzana John Leguizamo, quien recordó que acudía al evento con sus amigos desde niño.

‘Venía con mis amigos para disfrutar el ser latino y ver a la gente gozando. Puerto Rico es una isla chiquita pero es increíble lo que ha contribuido al mundo. Tiene el mayor porcentaje de todos los latinos en la NASA, cantantes, actores y boxeadores, y fueron los pioneros que nos ayudaron a todos los latinos a tener orgullo’, dijo a Efe.

Participaron también el salsero Frankie Negrón, la actriz y autora Sonia Manzano, pionera en la televisión pública de EE.UU., conocida por su papel de María en el programa infantil ‘Sesame Street’, el músico y compositor Willie Colón y la estrella de la NBA Víctor Cruz, elegido como atleta del año por el comité del desfile.