En gran parte de los países del mundo, las festividades navideñas culminan con la llegada del Nuevo Año. En Puerto Rico el calendario de celebración se extiende un poco más para esperar la llegada de los Tres Reyes Magos.

Son muchos los cuentos y relatos que existen sobre el tema, pero uno de los más conocidos dentro de la historia de la Epifanía cuenta que los magos Gaspar, Melchor y Baltasar, guiados por una estrella, llegaron hasta el lugar dónde nació Jesús de Nazaret para adorarlo y obsequiarle oro, incienso y mirra. Han pasado los años y el recuerdo de esa gesta sigue vivo en muchas culturas del mundo, como la de Puerto Rico.

Durante veinte años, hasta su fallecimiento el pasado 23 de mayo de 2014, la folclorista Norma Salazar celebró la promesa que le hizo a los Reyes Magos con un rosario cantado al ritmo de dos géneros de nuestra música autóctona: la plena y la bomba.

Este año Myrta Salazar siguió los pasos de su hermana y asumió la conducción del rosario cantado frente a cientos de personas que llegaron la noche domingo hasta la Plaza Santiago R. Palmer del municipio de Caguas para adorar a los Reyes y rendirle homenaje a la vida y legado de Norma Salazar.

Los rosarios cantados a los Reyes Magos se celebran en muchos lugares de Puerto Rico siendo muy común en pueblos de la montaña el uso de instrumentación típica a cargo del cuatro, la guitarra y el güiro, y se cantan décimas y aguinaldos. Se prepara un altar donde se colocan las figuras talladas de los Santos Reyes, velas y flores.

Disfrute la galería de NotiCel, que incluye esta promesa de Reyes, y otras fiestas dedicadas a estos santos en Guavate y el Capitolio.