La productora Kathy García y el director Eduardo Rosado, dejaron saber el lunes que tras más de un año de negociación con los cines y de buscar un acuerdo favorable, decidieron exhibir el filme ‘Sexo Salvaje’ por su cuenta fuera de las salas comerciales del país ‘debido a que las herramientas para negociar con los exhibidores eran pocas o nulas’.

‘En el pasado, muchos filmes puertorriqueños han quedado fuera del circuito de exhibición o en acuerdo desfavorables debido a que no se regula ni hay ley para negociación con la única cadena de cines del país. Un filme tan excelente como ‘Maldeamores’, se verá sometido a las decisiones del cine, lo que le impedirá posibilidad de recaudación. Es un negocio y esto se entiende y se respeta. Pero pone al productor local en desventaja. Es decir, no importa cuán buena sea la película, ni cuánto tiempo este como ‘Broche de Oro’, ni cuanto haga en taquilla como ‘Talento de Barrio’, no hay posibilidad de recaudación. El exhibidor se queda en el mejor de los casos, con el 60 por ciento de la taquilla, adicional que te cobra el alquiler de la sala, las veces que se ponga en trailer, los poster en los pasillos. El trato a nosotros es igual que filmes millonarios y en ese sentido es desventaja para lo local. El estado debe intervenir. Sin proponérselo, las salas de cine asesinan el cine local.’ indico Rosado en comunicado de prensa.

Según Rosado, la película ‘Sexo Salvaje’ narra la historia de un matrimonio que decide adentrarse en el mundo swinger al pasar por una crisis matrimonial. Es el primer drama erótico hecho en Puerto Rico y el primero que documenta la realidad del estilo de vida swinger en la isla. El filme se estará exhibiendo en el Teatro La Beckett en Rio Piedras, ya que en diciembre comenzará ronda de festivales y transmisión en canales PPV y On Demand dentro y fuera del país.

‘No hemos tenido problema vendiendo el filme fuera de Puerto Rico. Ni quejas, ni señalamientos, ni peros. El problema ha sido aquí en Puerto Rico. Por eso decidimos hacer una exhibición para las personas que nos continúan preguntando por el filme y de ahí partir a mercado fuera de la isla. A fin de cuentas, al que le ofenda el contenido del filme que no vaya a verla.’, indico García.