A tempranas horas de la mañana dio comienzo en la Iglesia San Carlos Borromeo Aguadilla la misa en conmemoración de los 100 años del Paseo de la Virgen del Carmen por la bahía de esa ciudad.

Al finalizar la liturgia oficiada por el monseñor Álvaro Corrada del Río, la atestada iglesia se fue vaciando poco a poco hasta que, a eso de las 9:30 am, comenzó a organizarse la procesión que acompañaría la estatua de la Virgen del Carmen y daría la vuelta a la plaza pública y luego se dirigiría por todo el litoral aguadillano hasta Punta Higüey.

Cientos de personas se integraron la procesión en la que se cantaron vítores a la Virgen del Carmen durante todo el trayecto por el Paseo Real Marina. Una vez pasaron frente a la residencia del alcalde Carlos Méndez, el incumbente municipal hizo entrega a los organizadores de una proclama y mensajes escritos de los presidentes camerales en reconocimiento por los 100 años de existencia de la celebración.

Una vez llegó la estatua a la rampa de embarque en la villa pesquera del sector Higüey, ante cientos de personas apostadas a todo lo largo del Paseo Real Marina, la virgen fue puesta sobre una embarcación, propiedad de Salvador ‘Tito’ Recio, la cual lideró la procesión marítima que se desplazó de sur a norte por la Bahía de Aguadilla.

Componían el grupo sobre 25 lanchas y botes escoltados por mar y aire por la Policía de Puerto Rico. Finalmente, a las 12:30 de la tarde se fue disipando en el horizonte la procesión de pescadores honrando a su patrona en dirección a la playa Crashboat.

Varios pueblos celebraron también su tradicional paseo de la Virgen del Carmen por el mar, tales como Mayagüez, Añasco, Aguada y Cabo Rojo entre otros. En Aguadilla, la tradición fue comenzada por el Padre Juan de Gorostiza en 1917. La costumbre de hacer grandes procesiones marítimas en honor a la Virgen del Carmen proviene de España durante el siglo XVIII, cuando se añadió la devoción carmelita a la devoción de San Telmo por parte de pescadores, marineros y otros obreros del mar.