Arrestos sin motivo, persecución, macanazos, y agresiones. Estas fueron las frases clave en las que coincidieron los testimonios de los estudiantes universitarios que denunciaron hoy ante la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) el abuso policiaco que han enfrentado tras manifestarse ante las políticas de la administración Fortuño.

Anthony Romero, director nacional de la ACLU explicó que el motivo de las vistas que celebra la organización en la Isla ante una delegación especial es llevar las denuncias ante las autoridades en Washignton, como el Departamento de Justicia federal.

'Yo se que hay muchas cosas que están ocurriendo en Puerto Rico que les preocupa a ustedes, tanto el problema del desempleo, el problema de los costos universitarios. Pero nuestra misión, como organización que esta defendiendo a los derechos civiles, es mucho más enfocada. Vamos a enfocarnos específicamente sobre el abuso policiaco'.

El panel de delegados escucha atentamente a los estudiantes deponentes. De izquiera a derecha: Juan Cartagena, la actriz Rosie Pérez, Romero, y Ángelo Falcón.

'No me puedo circunscribir a un solo evento porque lo que voy a plantear es la persecución en términos políticos contra este servidor', comenzó a narrar el estudiante José García Oquendo, quien fue arrestado por primera vez por la Policía en el 2008 en una marcha.

El activista homosexual recordó que en esa primera instancia una patrulla lo atropelló, 10 agentes lo recogieron y lo volvieron a tirar contra el piso, lo arrestaron, le quitaron el aire y sus pertenencias. Tras detenerlo por unas horas en la celda, lo dejaron libre sin cargos.

Detalló que en el 2009, un policía federal fue a su casa a buscarlo. Sin embargo, aún no ha recibido información del por qué de esa visita.

Del 12 agosto del pasado año, García Oquendo relató que los hechos ocurridos en la avenida Universidad en Río Piedras, donde unos agentes lanzaron gases lacrimógenos a jóvenes, y él fue acorralado.

'Cuando se dieron cuenta que los estudiantes universitarios estábamos ayudando a las personas que estaban siendo asfixiadas por los gases lacrimógenos y gas pimienta, acorralan la casa donde estábamos y nos persiguen por toda la urbanización Santa Rita. Lo cual me costó que días después yo cayera hospitalizado psiquiátricamente en el Hospital Capestrano, en el cual todavía soy atendido. Todavía siento delirios de persecución, no duermo bien, no tengo buena salud', relató.

Por su parte, Gamelyn Oduardo, estudiante de la Escuela de Derecho revivió su arresto del pasado 13 de enero, como parte del proceso huelgario de la Universidad de Puerto Rico (UPR).

Oduardo contó que los policías lo golpearon sin parar el pasado 13 de enero.

'Es uno de los días que más se me marca en la cabeza. Me arrestaron por protestar. Yo corría junto a cientos de estudiantes para evitar la embestida de cientos de efectivos de la fuerza de choque, había aproximadamente 300, 400 oficiales corriendo detrás de nosotros'.

Lo golpearon sin parar

'En vez de ponerme bajo arresto, me golpearon en repetidas ocasiones y yo trataba de soltarme para salir corriendo. Me estaban diciendo, déjate arrestar pero no me estaban arrestando. Yo no veía las esposas, lo que veía era las macanas. No fue hasta que me hicieron una llave que me arrestaron', aseguró.

Según Oduardo, pasaron más de 12 horas para conocer las razones del arresto, luego de haber paseado en un carro de la uniformada, ser sometidos a presión psicológica y pasar largo rato en una celda.

Romero lamentó que las múltiples denuncias no se hayan documentado con querellas ante la Policía.

'Hoy estuve reunido con el secretario de Estado, Kenneth McClintock y con el secretario de la gobernación Marcos Rodríguez Emma, preguntamos nosotros sobre las investigaciones. Nos dijeron a nosotros que son tan pocas las personas que han hecho querellas. Entonces, les digo que la falta de plantear querella la están utilizando como evidencia que no hay nada más', indicó.

El ex pelotero Carlos Delgado también formó parte de la delegación de la ACLU que investiga las violaciones de derechos en la Isla.

Mientras Ricardo Olivero, de Radio Huelga, hizo referencia a su arresto durante una cobertura en vivo para el medio alternativo creado por la comunidad universitaria.

'A mí me arrestaron mientras yo cubría en vivo en una de las rondas de desobediencia civil. Podría decirles de cómo me aplicaron las ya famosas técnicas de presión, de cómo me apretaron las esposas y me quitaron la circulación por mucho tiempo y al día de hoy no recupero la sensación en dos de mis dedos. Pero de la misma manera les puedo decir que tan pronto salí de la cárcel, al próximo día estaba cubriendo en la calle', sostuvo.

Olivero, solicitó a la ACLU que al representar al estudiantado no deben victimizarlo.

'Quizás lo más frustrante que yo sentí de la conversación era cuando estábamos reuniéndonos esta mañana con la rectora de la Universidad, con el señor McClintock, y es que estaban hablando de la población estudiantil como si fueran los peores. No dijeron eso, pero se sentía un poco el resentimiento hacia los estudiantes', apuntó Romero.

La delegación especial de la ACLU también escuchó esta tarde a varios deponentes que concentraron sus exposiciones en el ataque de la Policía a manifestantes el 30 de junio pasado en el Capitolio.

Entre ellos Betty Peña, quien con su hija Elisa aparece en una de las fotos del día tirada en el piso mientras un oficial las golpea, dijo que no radicó querella porque ese mismo día el superintendente José Figueroa Sancha alabó la labor de los oficiales. El presidente del Colegio de Abogados, Osvaldo Toledo, y la representante popular Carmen Yulín Cruz Soto, relataron lo que vieron ese día.

Cruz lo contrastó con cómo la Policía de Wisconsin permitió que manifestantes tomaran pacíficamente el capitolio de ese estado sin ningún incidente violento.

Asimismo se celebró un panel sobre el ejercicio del periodismo, compuesto por el presidente de la Asociación de Periodistas de Puerto Rico, Rafael Lenín López, el presidente de la Asociación de Fotoperiodistas, Luis Rolón, el periodista independiente César Colón Montijo, y el codirector del Centro de Periodismo Investigativo, y de NotiCel, Oscar J. Serrano, quienes describieron la serie de ataques violentos que periodistas y fotoperiodistas han sufrido a manos de la Policía y lo inútil que ha sido intentar hacer algún tipo de coordinación con la uniformada.

Además, indicaron que ninguna de las querellas contra la Policía en estos casos, en los que sí se han radicado varias querellas, ha prosperado.

'Hoy tuvimos la oportunidad de exponerle a esta importante delegación de la ACLU los reprochables eventos por lo que hemos atravesado los periodistas con la Policía de Puerto Rico, principalmentedurante manifestaciones de oposición a políticas del Gobierno actual. Confiamos en que esta influyente organización tome los pasos para mejorar el clima de la libertad de prensa en el país', manifestó Lenín López.

Colón señaló cómo la Policía ha intervenido violentamente con periodistas para evitar ser grabados en el descargue de sus funciones. Por su parte, Serrano subrayó que el origen de las dificultades para realizar trabajo periodístico está, en parte, en la falta de leyes y reglas que protejan el acceso a la información, y en la visión gubernamental de que los periodistas y los medios de comunicación son agentes políticos de la oposición.

Lenín además detalló que 'la dirección de la ACLU recibió con preocupación nuestros planteamientos y nos requirió documentos y evidencia gráfica para en su momento tomar las acciones que entiendan necesarias'.

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Anthony Romero, director national de la ACLU explicó que el motivo de la organización es llevar las denuncias ante las autoridades en Washignton, como el Departamento de Justicia federal.

'Yo se que hay muchas cosas que están ocurriendo en Puerto Rico que les preocupa a ustedes, tanto el problema del desempleo, el problema de los costos universitarios. Pero nuestra misión, como organización que esta defendiendo a los derechos civiles, es mucho mas enfocada. Vamos a enfocarnos específicamente sobre el abuso policiaco'.

'No me puedo circunscribir a un solo evento porque lo que voy a plantear es la persecución en términos políticos contra este servidor', comenzó a narrar el estudiante José García Oquendo, quien fue arrestado por primera vez por la Policía en el 2008 en una marcha.

El activista homosexual recordó que en esa primera instancia una patrulla lo atropelló, 10 agentes lo recogieron y lo volvieron a tirar contra el piso, lo arrestaron, le quitaron el aire y sus pertenencias. Tras detenerlo por unas horas en la celda, lo dejaron libre sin cargos.

Detalló que en el 2009, un policía federal fue a su casa a buscarlo. Sin embargo, aún no ha recibido información del por qué de esa visita.

Del 12 agosto del pasado año, García Oquendo relató que los hechos ocurridos en la avenida Universidad en Río Piedras, donde unos agentes lanzaron gases lacrimógenos a jóvenes, y él fue acorralado.

'Cuando se dieron cuenta que los estudiantes universitarios estábamos ayudando a las personas que estaban siendo asfixiadas por los gases lacrimógenos y gas pimienta, acorralan la casa donde estábamos y nos persiguen por toda la urbanización Santa Rita. Lo cual me costó que días después yo cayera hospitalizado psiquiátricamente en el Hospital Capestrano, en el cual todavía soy atendido. Todavía siento delirios de persecución, no duermo bien, no tengo buena salud', relató.

Por su parte, Gamelyn Oduardo, estudiante de la Escuela de Derecho revivió su arresto del pasado 13 de enero, como parte del proceso huelgario de la Universidad de Puerto Rico (UPR).

'Es uno de los días que más se me marca en la cabeza. Me arrestaron por protestar. Yo corría junto a cientos de estudiantes para evitar la embestida de cientos efectivos de la fuerza de choque, había aproximadamente 300, 400 oficiales corriendo detrás de nosotros'.

Lo golpearon sin parar

'En vez de ponerme bajo arresto, me golpearon en repetidas ocasiones y yo trataba de soltarme para salir a corriendo. Me estaban diciendo, déjate arrestar pero no me estaban arrestando. Yo no veía las esposas, lo que veía era las macana. No fue hasta que me hicieron una llave que me arrestaron', aseguró.

Según Oduardo, pasaron más de 12 horas para conocer las razones del arresto, luego de haber paseado en un carro de la uniformada, ser sometidos a presión psicológica y pasar largo rato en una celda.

Romero lamentó que las múltiples denuncias no se hayan documentado con querellas ante la Policía.

'Hoy estuve reunido con el secretario de Estado, Kenneth McClintock y con el secretario de la gobernación Marcos Rodríguez Emma, preguntamos nosotros sobre las investigaciones. Nos dijeron a nosotros que son tan pocas las personas que han hecho querellas. Entonces, les digo que la falta de plantear querella la están utilizando como evidencia que no hay nada más', indicó.

Mientras Ricardo Olivera, de Radio Huelga, hizo referencia a su arresto durante una cobertura en vivo para el medio alternativo creado por la comunidad universitaria.

'A mí me arrestaron mientras yo cubría en vivo en una de las rondas de desobediencia civil. Podría decirles de cómo me aplicaron las ya famosas técnicas de presión, de cómo me apretaron las esposas y me quitaron la circulación por mucho tiempo y al día de hoy no recupero la sensación en dos de mis dedos. Pero de la misma manera les puedo decir que tan pronto salí de la cárcel, al próximo día estaba cubriendo en la calle', sostuvo.

Olivera, solicitó a la ACLU que al representar al estudiantado no deben victimizarlo.

'Quizás lo más frustrante que yo sentí de la conversación era cuando estábamos reuniéndonos esta mañana con la rectora de la Universidad, con el señor McClintock, y es que estaban hablando de la población estudiantil como si fueran los peores. No dijeron eso, pero se sentía un poco el resentimiento hacia los estudiantes', apuntó Romero.

En las vistas públicas celebradas en la Escuela de Derecho de la UPR también estuvieron presentes la actriz Rosie Perez y el pelotero Carlos Delgado.