Maestros truenan contra sec. DE
Líderes magisteriales llamaron hoy la atención sobre los resultados de las Pruebas Puertorriqueñas de Aprovechamiento Académico (PPAA) presentados y celebrados por el secretario de Educación, Jesús Rivera Sánchez, para apuntar que son engañosos y adelantar que se utilizarán como pretexto para la privatización de servicios educativos.
El presidente de la Federación de Maestros, Rafael Feliciano, catalogó el anuncio que hizo ayer Rivera Sánchez como una movida propagandística como antesala a la visita mañana del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y desmintió, además, el señalamiento que hizo el titular de Educación de que el 99% de los estudiantes habían tomado las pruebas, cuando el gobernador ya había mencionado que había sido el 95 por ciento.
Feliciano insistió en que estas pruebas son un fraude, por entender que realmente no miden el aprovechamiento de los estudiantes y 'están diseñadas para el fracaso, para desprestigiar la escuela pública y justificar la privatización'. Y es que el fracaso de los estudiantes en estas escuelas significa una mayor entrada de fondos federales al sistema público.
Aún así, la Federación consideró muy oportunista que el secretario haya mencionado un aumento entre 1 y 7% en el aprovechamiento académico y no decir que 'fueron un rotundo fracaso respecto a las metas establecidas por el gobierno federal y el Departamento de Educación'.
Y es que mientras la meta era alcanzar un 81% de competencia en español y 83% en matemáticas, los resultados revelaron que solo un 45% de los estudiantes que tomaron las pruebas demostraron aprovechamiento en español y, en matemáticas, la competencia apenas alcanzó un 27%.
En inglés y ciencias las mejorías fueron de 2%, para un 41%, y de 10%, para un 53%, respectivamente. En resumen, a juzgar por los números, menos de la mitad de los estudiantes del sistema público que tomaron las pruebas pudieron demostrar aprovechamiento en las áreas evaluadas.
Así, la mejoría de 5% en español y de 2% en matemáticas, en comparación con los resultados del año pasado, distan mucho del objetivo que tenía el Departamento y para el cual se invirtieron millones de dólares en programas administrados por compañías privadas para estimular el aprovechamiento en los estudiantes.
'La mal llamada Operación Éxito, anunciada con bombos y platillos como la panacea para mejorar el aprovechamiento, resultó ser la Operación Fracaso pues se embolsicó más de 15 millones de dólares y lo que hizo fue el ridículo', arremetió Feliciano.
'Ese fue dinero botado a la basura, precisamente, porque a esas compañías mercaderes de la educación lo único que les interesa es saquear los fondos públicos y contribuir a la privatización de los servicios escolares', indicó Feliciano en referencia también a otros 40 millones de dólares que se invirtieron entre el diseño, los contratos y la administración de las pruebas.
Los líderes de la Asociación de Maestros y de la Unión de Educadores y Trabajadores de la Educación (UNETE) también objetaron los resultados de las pruebas. INS