Mientras la Asociación Pro Derecho y Rehabilitación del Confinado (Ñeta) lanzó una advertencia ante la indiscriminación en los actos violentos desatados en el país, el superintendente de la Policía, Emilio Díaz Colón, argumentó que todo se debe a un 'disloque social', por lo que pidió mayor tolerancia, respeto y comunicación a la ciudadanía.

Los Ñetas advirtieron por medio de comunicación escrita que impondrán sus leyes carcelarias, a todo aquel individuo que cometa un acto no honorable para ellos.

Para Díaz Cólon 'debemos nosotros seguir respetando los valores y las personas'.

Añadió que el 49 por ciento de los asesinatos en la Isla se deben al mundo de la droga. Un 10 por ciento de los asesinatos es por crímenes pasionales o de violencia doméstica. Asimismo,un 30 % es por rencillas o peleas.

'Todo esto se debe a los valores, la educación y el disloque social', sentenció.

No obstante, no favoreció el que los Ñetas hagan valer sus reglas una vez el individuo que cometió los actos sea ingresado a una institución penal.

Ante esto afirmó 'yo no creo que nadie debe coger la justicia en sus manos. Lo que sí es que debemos de tratar de ver cómo nosotros tenemos un poco más de comprensión, comunicación y tolerancia'.

De otro lado, el Superintendente volvió a rechazar el pedido de renuncia que llevan desde hace varias semanas haciéndole diversos líderes políticos, entre ellos varios de su Partido Nuevo Progresista (PNP).

En esa línea expuso que 'yo vine aquí a trabajar. En este mismo edificio (La Fortaleza) hice un compromiso con el Gobernador el 4 de julio de 2011, de que iba a trabajar con él hasta diciembre del 2012'.

Dijo que el derecho a la libertad de expresión cobija a todas las personalidades que han presentado su objeción sobre su posición al frente de la Policía.

'Yo voy a seguir trabajando duro como he trabajado todos los días. Nada ni nadie me va a desviar el norte', afirmó.

Entretanto, contrario a otros funcionarios de su administración. Díaz Colón pareció acoger el informe federal entorno al abuso de la fuerza por parte de la Uniformada.

'Nosotros estamos utilizando este documento del Departamento de Justicia Federal como lo que es la Reforma de la Policía de Puerto Rico. Estamos trabajando siguiendo las guías que hay ahí y esperamos cumplir con los requisitos que nos están implantando en ese documento que posiblemente puede durar 5, 6, 10 o 15 años', apuntó.

De hecho, expresó que están 'desmenuzando' el informe, para evaluar y remediar los 133 señalamientos que le hacen en contra de la Policía de Puerto Rico.