Conmoción por el Caso Zalduondo en las esferas de poder
Desde que NotiCel lo reveló el viernes de madrugada, la incautación por parte de agentes federales de casi $600,000 propiedad del desarrollador Juan Ramón Zalduondo Viera no ha dejado de ser tema de discusión en las esferas de poder de la sociedad puertorriqueña.
Este fin de semana no hubo reunión de personas influyentes en la que la pregunta de rigor no fuera 'viste lo de Juan Ramón?'. Así, sin apellidos, porque el también abogado estaba a nivel de 'tú' con figuras desde el presidente del Tribunal Supremo, Federico Hernández Denton, hasta exgobernadores y figuras de ambos partidos principales, siendo la del Partido Popular Democrático la alianza principal.
Zalduondo fue miembro de la Junta de Síndicos de la Administración de Compensaciones por Accidentes de Automóviles (ACAA) en la Administración Acevedo Vilá; fue miembro de la Comisión de Evaluación Judicial, encargada de recomendar sobre la renominación o ascenso de jueces, así como miembro de la dirección ejecutiva de la Fundación Histórica del Tribunal Supremo, en momentos en que ese foro evaluaba reclamaciones legales contra sus proyectos de construcción.
También, el fenecido exjuez asociado del Supremo, Jaime Fuster, era cuñado de Zalduondo, y el exjuez asociado, Baltasar Corrada del Río, fue cabildero del desarrollador durante la discusión legislativa del Corredor Ecológico del Noreste, episodio en el que los intereses de Zalduondo estuvieron protegidos por los ex senadores Carlos Díaz, Kenneth McClintock y el hoy convicto Jorge De Castro Font
Zalduondo también estuvo en las juntas del Puerto de las Américas, y en la de Redesarrollo de Roosevelt Roads.
Entre las figuras con las que NotiCel ha conversado el tema sin permiso para atribución, las reacciones incluyen suspicacia de que las autoridades federales sometan el caso tan cercano a las elecciones, a pesar de que llevaban desde el año pasado vigilando las transacciones del empresario; y también asombro por los detalles de la pesquisa y por la aparente estupidez, o inocencia, que revela el que Zalduondo prosiguiera con los depósitos de grandes cantidades de efectivo aún después de que los agentes federales le pidieron que compareciera ante ellos el 23 de marzo para explicar la procedencia. En ese momento, optó por guardar silencio.
Según la declaración que da base al caso de incautación, los perros de los agentes encontraron trazos de narcotráfico en el dinero que, depósito tras depósito, reflejaba las mismas características: pacas de billetes de $20 amarrados con gomas, húmedos, mal olientes y sin que el desarrollador supuestamente supiera exactamente cuánto estaba depositando.
Al día de hoy, las autoridades sólo han radicado una acción civil para quedarse con $577,728.85 de dos cuentas en la Cooperativa La Puertorriqueña, y $2,879 de una cuenta en el Banco Santander. Pero contra el abogado no hay ningún caso radicado a título personal. Queda por ver si decide comparecer en el caso del dinero para recobrarlo.