Más vulnerables los menores de edad a que les roben la identidad
Imagínese que su hija de siete años debe más de hipoteca de lo que usted gana al año. Es posible que pase, si le roban la identidad.
Muchos padres no están conscientes de que sus hijos menores de edad están en riesgo de ser víctimas de robo de identidad y que son aun más vulnerables que ellos mismos.
De acuerdo con el informe de 2012 sobre el robo de identidad de menores que produce All Clear ID, los niños y las niñas están 35 veces más propensos a ser víctimas del robo de identidad que los adultos. La información estadística demuestra que mientras más pequeño es el niño, más vulnerable es, pues los ladrones de información tienen más tiempo para utilizar la identidad del menor.
Y es que de eso se trata el robo de identidad de los más pequeños, a la mayor probabilidad de que no se detecte hasta que adquieren la mayoría de edad, solicitan su primer trabajo, su primera tarjeta de crédito, un préstamo estudiantil y descubren que les es negado por un historial crediticio negativo, incluso, con antecedentes criminales a su nombre.
Entonces, imagínese la pesadilla de comenzar la adultez cargando con problemas de otras personas.
Según el más reciente estudio, en el que se examinaron el historial de 27,000 niños, hallaron cerca de 3,000 víctimas de robo de identidad. El 15% eran menores de 5 años, 26% tenían entre 6 y 10 años.
Los criminales utilizan los números de seguro social robados para sacar tarjetas de crédito, préstamos de autos, préstamos estudiantiles, hipotecas y líneas de crédito para negocios.
Cómo lo hacen?
Recuerde cuántas veces le han solicitado el número de seguro social de su hijo o hija para gestiones en la escuela, en actividades extracurriculares. Así de numerosas son las oportunidades de que esa información llegue a las manos equivocadas.
El segundo paso para los criminales es establecer un historial de crédito abriendo cuentas del tipo que menos requerimientos tienen, como las de celular y algunas de las que ofrecen las tiendas. Utilizan el número de seguro social con otro nombre y fecha de nacimiento. Resulta que los negociados de crédito solo verifican si el número es válido, no corroboran que responda al nombre y fecha suministrados. Según All Clear ID, no es inusual que estas personas tomen préstamos para pagar préstamos anteriores, así van aumentando su capacidad de crédito hasta que consiguen la cantidad máxima deseada y entonces desaparecen, dejando todas las cuentas sin pagar y arruinando el crédito de quien todavía no ha tomado nada prestado.
Quienes incurren en este tipo de actividad delictiva, muchas veces, ya han arruinado su propio crédito o forman parte de organizaciones criminales sofisticadas que tienen acceso a la información de los niños y las venden a terceros. Otras veces, son los encargados de hogares sustitutos para niños al cuidado del gobierno. Ocurre, incluso, que familiares con el crédito dañado toman el número de seguro social 'prestado', sin intenciones de hacer daño. Aun así es fraude.
Muchos padres pensarán que con obtener un informe de crédito de sus hijos podrán determinar si han sido víctimas de robo de identidad, pero la realidad es que los reportes de crédito surgen a partir de un número de seguro social, junto con un nombre y una fecha de nacimiento. Los criminales tienden a adjuntar el número de seguro social robado a otro nombre y fecha. Como resultado, el 99% de los reportes de crédito fallan en ofrecer señales que den con el robo de identidad.
Las recomendaciones son que los padres guarden muy bien la tarjeta de seguro social de sus hijos, destruya cualquier documento que lo contenga y que no necesite. También se sugiere preguntar cuando le soliciten el número por qué se lo requieren y orientar a los niños sobre la seguridad en internet y en las redes sociales.