Durante la presentación de argumentos en contra de la paralización de la puesta en vigor del reglamento del Departamento de Salud que regula el uso de la marihuana medicinal en la Isla, y que fuera llevada al Tribunal de San Juan por los representantes penepes María Milagros Charbonier y Carlos 'Johnny' Mendez, su abogado, el licenciado y sacerdote, Carlos Perez Toro, se presentó ante la corte mientras lucía su cuello clerical.

El acto levantó serías interrogantes sobre la separación de Iglesia y Estado, concepto legal y político por el cual las instituciones del Estado y las religiosas se mantienen separadas.

Para el secretario de Justicia, César Miranda, la decisión del abogado de llevar puesto su cuello clerical durante un proceso judicial fue un acto indebido que podría tener como propósito principal influenciar a la Corte.

'Todo proceso administrativo de la justicia debe estar libre de influencias indebidas. La vestimenta ha sido motivo de discusión a lo largo del tiempo, pues lo que se busca es lograr una apariencia decorosa de manera que lo importante sea el derecho y los argumentos que se exponen, más que una vestimenta particular', aseguró Miranda.

'Es fundamental evitar cualquier tipo de prejuicio. Cualquier vestimenta sugestiva de alguna afiliación, sea política, ideológica o religiosa, no puede tener cabida en el tribunal. De hecho, debe contar con el rechazo unánime de los propios tribunales y de los abogados y abogadas que postulamos en los mismos', sentenció.

Según explicó el Titular de Justicia, no existe una reglamentación que obligue a un abogado a postular utilizando corbata y chaqueta aunque se presume que esta es una vestimenta adecuada, revestida de la formalidad que conlleva el decoro y el respeto al Tribunal y a la ciudadanía.

No obstante, Julio Fontanet Maldonado, decano de la Facultad de Derecho de la Universidad Interamericana, no fue tan inquisitivo sobre el uso del cuello clerical en corte por parte de Pérez Toro.

'La primera reacción tiene que ser de impacto y de sorpresa. Superado esto, uno debe cuestionarse qué tan importante es la vestimenta de un abogado durante la tramitación de un caso. Para los que pensamos que lo importante son los argumentos, me parece que el ajuar o la vestimenta pasa a un segundo plano siempre y cuando no vulnere la dignidad de los procesos judiciales. No me parece que la vestimenta tradicional de un sacerdote afecte o lesione esa dignidad', aseguró el reconocido abogado.

'No obstante, yo sí tendría objeción que si durante un juicio por jurado, se utilice algún tipo de vestimenta o uniforme que pueda influenciar indebidamente la mente de un juzgador. Pienso que un proceso que es adjudicado por un juez, la vestimenta en esos términos no va a afectar', añadió.

Fontanet Maldonado señaló que el código de vestimenta para los abogados y fiscales en los tribunales responde únicamente al uso y costumbre, aunque admitió que esta costumbre no debería ser tan estricta en un país como Puerto Rico.

'Realmente la corbata es uso y costumbre, en algunos países se usan togas y te la pones por encima de tu ropa casual. En un país tropical no tiene tanto sentido andar con corbata y con gabán', concluyó.

NotiCel contactó al abogado y sacerdote Pérez Toro pero este declinó hacer comentarios al respecto.